La única mujer que en 2021 recibe el premio Nobel es la filipina María Ressa, quien compartió el Nobel de la Paz con el ruso Dmitry Muratov. Ambos periodistas en sus respectivos países, acérrimos defensores de la libertad de expresión.
El premio Nobel fue instituido por Alfred Nobel, famoso científico sueco, ingeniero químico, escritor, experto en explosivos e inventor de la dinamita. Fue empresario de diversas fábricas de armamento, que le produjeron una gran fortuna.
Alfred Nobel fue un hombre solitario, nunca contrajo matrimonio, ni tuvo hijos. Con el prurito de que sus inventos servían, entre otras cosas, para destruir al ser humano, en su testamento instauró un fondo con el que anualmente, se premiaría a las personas que durante el año anterior hubieran prestado a la humanidad los mayores servicios en: Literatura, Fisiología, Medicina, Química y en la Paz. Posteriormente, el Banco de Suecia, creó en su memoria el premio de Economía.
Los premios Nobel se entregan, por el Rey de Suecia, en el Palacio de Conciertos de Estocolmo, el 10 de diciembre de cada año, fecha del aniversario luctuoso de su fundador, con excepción del Premio Nobel de la Paz, que se entrega ese mismo día, unas horas antes en Oslo, capital de Noruega, por el Parlamento de ese país.
En esta ocasión me referiré al Premio Nobel de la Paz y específicamente, a la galardonada María Ressa, de ninguna manera por demeritar a Dmitry, sino, como un reconocimiento a la única mujer que lo recibió en 2021.
María Angelita Ressa es originaria de Manila, Filipinas. Cuando tenía 10 años, su familia emigró a EU, realizó sus estudios profesionales en la Universidad de Princeton y se hizo acreedora a la Beca Fullbright para un máster de periodismo en la Universidad de Filipinas.
María ha efectuado un trabajo periodístico de suma importancia desde su regreso a Filipinas, en 1986. Se desempeñó durante 20 años como periodista para CNN, en Manila y Yakarta, de esta última llegó a ser la jefa de redacción, en donde se especializó en periodismo de investigación, primordialmente, sobre terrorismo en Asia. En 2004 y 2010, fue directora de noticias de la televisora más importante de Filipinas.
En 2012, junto con otros colegas filipinos fundó el sitio web Rappler, que se convirtió en un influyente medio de comunicación, pues fue pionero en su país en incluir contenidos con tecnología moderna como multimedia, redes sociales y verificación de hechos.
En el señalado sitio Web ha publicado múltiples denuncias relacionadas con la gestión del grupo en el poder. Lo cual, le motivó acusaciones de todo tipo: desde ser acusada de contravenir la ley por tener dentro del grupo un accionista extranjero, acoso por motivos de género, por ser periodista independiente, así como el récord de mensajes de odio por hora, hasta ser acusada penalmente de evasión de impuestos.
2020 fue un año de contrastes para María, pues en el mes de junio fue condenada por un Tribunal de Manila, por difamación cibernética y, en septiembre fue designada como miembro de la “Junta de supervisión Real de Facebook”.
Ha sido distinguida con numerosos reconocimientos, por mencionar algunos; “Personas del año 2018” para la revista Time; Premio Mundial de la Libertad de Prensa Unesco-Guillermo Cano y Premio Nobel de la Paz 2021.
Sin duda alguna, se trata de una mujer fuera de serie, poseedora de valentía, profesionalismo y convicción extraordinarios, en defensa de la libertad de expresión y los derechos humanos. Una periodista ejemplar. ¡En hora buena!
Ministra en Retiro de la Suprema Corte de Justicia de la Nación
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