Este año, la revista Forbes encabezó su lista de las 100 mujeres más poderosas del mundo con Mackenzie Scott , una de las mujeres con mayor poder económico. Trabajó y estuvo casada con el fundador de “Amazon”, una de las empresas más exitosas del planeta. Su divorcio provocó que recibiera 25% de la empresa, de la cual Mackenzie ha decido donar una parte a diversas asociaciones y personas de forma totalmente altruista.
Mackenzie Scott nació en 1970 en San Francisco, California, estudió licenciatura en Filología Inglesa en la Universidad de Princeton, en donde se graduó con los más altos reconocimientos. Fue discípula de Chloe Ardelia Wofford , mejor conocida por su pseudónimo de escritora, Toni Morrison, quien fuera la primera mujer afroamericana en obtener en 1993, el Premio Nobel de literatura. Esta destacada maestra señaló a Mackenzie como una de sus mejores alumnas en la clase de Escritura Creativa.
Como escritora, Mackenzie ha publicado dos novelas: The Testing of Luther Albright y Traps. En 2006 fue reconocida con el American Book Award.
Al concluir sus estudios universitarios Mackenzie se trasladó a Nueva York, en donde trabajó con Jeff Bezos en el Fondo de inversión alternativa D. E. Shaw, con quien en 1993 contrajo matrimonio, en el que procrearon a cuatro hijos.
En 1994, la pareja emigró a Seattle, Washington , e iniciaron la operación de su empresa Amazon, una compañía de comercio electrónico dedicada, desde la entrega de toda clase de productos a la puerta de su casa, hasta la creación y distribución de películas, música y más. En la que su clientela puede encontrar lo que buscan en línea y en persona, pretendiendo siempre: precios más bajos, mejor selección y servicios convenientes.
De su fundación a la fecha, Amazon ha tenido un crecimiento exponencial. De una pequeña librería en línea, se convirtió en una de las empresas cuyo valor rebasa un billón de dólares.
Amazon tiene más de un millón de empleados en todo el mundo en los centros de cumplimento globales, ubicaciones minoristas, centros de datos, oficinas corporativas, centros tecnológicos y oficinas centrales de Puget Sound, del Estado de Washington, y Arlington, Virginia.
En 2019, la pareja fundadora de este emporio comercial que los convirtió en uno de los matrimonios más ricos del mundo, anunció su separación a los medios de comunicación.
En ese mismo año, Mackenzie firmó The Giving Pledge , el compromiso creado por Bill y Melinda Gates y Warren Buffett en 2014, que consisten en “una invitación abierta a los multimillonarios o aquellos que lo serían si no fuera por sus donaciones, para que dediquen públicamente la mayor parte de su riqueza a la filantropía”.
Compromiso mediante el cual Mackenzie expresó que, a lo largo de su vida, donaría al menos la mitad de su riqueza a organizaciones sin ánimo de lucro. Según reportaje de Town&country, manifestó: “Mi enfoque de la filantropía seguirá siendo reflexivo. Tomará tiempo, esfuerzo y cuidado. Pero no esperaré. Y seguiré haciéndolo hasta que la caja fuerte esté vacía”. Entre 2020 y 2021 ha donado más de ocho mil millones de dólares a más de 286 instituciones.
Mackenzie afirma que la cantidad de dinero que cambia de manos no lo convierte en filantropía, es la intención y el esfuerzo lo que le otorga esa connotación.
Sin duda Mackenzie Scott es una mujer admirable, pues ante su éxito empresarial, su actitud ante la vida es proporcionar, generosamente, una ventana de oportunidad para la realización de los sueños de personas carentes de recursos.
@margaritablunar