El producto interno bruto (PIB) es el valor de mercado de todos los bienes y servicios finales producidos en el interior de un país durante un periodo de tiempo determinado. El PIB es un indicador que cuantifica el volumen de actividad económica de un país que se produce en un periodo de tiempo, dice Lucía Gastón Lorente, periodista y filósofa española.
El crecimiento del PIB es una medición cuantitativa de cómo se incrementa la economía de un país, no es un indicador de cómo se distribuye esa riqueza creada. Uno de los métodos de la teoría económica para calcular el PIB es el método del gasto, con la siguiente formula: PIB =Consumo privado (C) + Inversión empresarial (I) + gasto público (G) + comercio exterior neto, es decir exportaciones menos importaciones (X-M). Con esta fórmula podemos preguntarnos: ¿qué puede hacer el gobierno para sacar al país del estancamiento económico?
El gasto público (G) está dentro de su responsabilidad directa, y es importante que este sea principalmente en inversión productiva, genere competividad y además se ejerza con criterios redistributivos de riqueza. El gobierno puede ejercer su gasto público a tiempo, sin subejercicios ni corrupción, cuidando que los dineros de pueblo se ejerzan con eficiencia, transparencia y honestidad.
Por otro lado el gobierno tiene la responsabilidad, a través del Banco de México, de no sobrevalorar el peso porque esto inhibe las exportaciones e incentiva las importaciones. También puede tomar acciones que promuevan las exportaciones de productos mexicanos y la venida de turistas extranjeros.
El gobierno puede hacer que un porcentaje de sus compras sean a PYMES, además puede promover una legislación que obligue a pagar a sus proveedores en un plazo no mayor a los 60 días y si no que cause intereses iguales a los que cobra el SAT por recargos. También puede impactar el consumo incrementando el salario mínimo general en todo el país a 6,000 pesos mensuales. Y establecer unos salarios mínimos específicos en el gobierno, por ejemplo el salario mínimo para los policías en el país debería ser de 18,000 pesos mensuales.
Bien se pudiera seguir una política laboral en el sector público de poca gente, buena y bien pagada. La 4T habla de justicia social, empiecen con los empleados del gobierno. Finalmente el gobierno debe mantener la estabilidad macroeconómica, generar confianza en la IP y no entorpecer la inversión productiva. Con este análisis podemos ir concluyendo: ¿en qué la 4T se ha equivocado, cuáles han sido sus aciertos, y qué le falta por hacer para incentivar el crecimiento económico?
Hablando de desarrollo, Amartya Sen, Premio Nobel de Economía 1998, nos dice: “El desarrollo es la ampliación de las libertades, y la ampliación de las libertades es el mejor medio para lograr el desarrollo”. Así no tiene la misma libertad alguien que tiene qué comer, que alguien con hambre; tampoco tiene la misma capacidad de elegir alguien sano que alguien con problemas de salud; no tiene la misma libertad de opción alguien con educación que un analfabeta. Por esto Sen nos plantea la urgente necesidad de eliminar las barreras que limitan las libertades de los ciudadanos.
Tenemos que eliminar la hambruna que niega a los mexicanos la libertad básica de sobrevivir; necesitamos dar acceso real y efectivo a servicios de salud de calidad y a servicios básicos como la luz, agua potable y drenaje sanitario.
Debemos proporcionar educación funcional y oportunidades de empleo a los mexicanos de todas las regiones. Es necesario proveer seguridad social y pensiones que garanticen la dignidad de las personas. Debe promoverse una cultura de igualdad entre hombres y mujeres, de libertades políticas y de respeto a los derechos humanos básicos. Preguntémonos si las acciones de la 4T amplían las libertades o generan dependencia. Nos queda claro que hay mucho por hacer tanto para impulsar el crecimiento, como el desarrollo, si de veras se quiere transformar al país.
Ingeniero industrial y empresario
