Este mes de agosto conmemoramos 38 años de vida fructífera de nuestro Sindicato Nacional de los Trabajadores del Servicio Postal Mexicano, “Correos de México”, que en sí misma es una fecha trascendental para todos quienes formamos parte de esta organización sindical que a base de compromisos cumplidos y metas logradas a favor de los trabajadores sindicalizados, es un referente ya para el movimiento sindical del país. Y esto no solo son palabras jubilosas de un aniversario, sino están respaldadas por una historia de esfuerzos, lucha, tesón, fracasos, logros, que han pavimentado el camino que nos ha traído hasta donde nos encontramos ahora.
Como todo principio, el de nuestra organización fue muy difícil, en tanto que los tiempos económicos, sociales, y políticos de la década de los años ochenta estaba sellada por una oligarquía política difícil de sortear, donde permeaban condiciones democráticas muy limitadas. Lo que para muchos era un proyecto que parecía imposible de lograrse, pese a todo, poco a poco fue tomando forma y fortaleciéndose con ideas y propuestas de la propia base trabajadora que estaba consciente de la necesidad de contar con una organización verdaderamente sólida y combativa que salvaguardara sus derechos laborales y ampliara sus expectativas de mejora en prestaciones para ellos y sus familias.
Las adversidades a las que nos enfrentamos desde un principio para concretar el proyecto, nos enseñaron que la unidad y tenacidad, serían las condiciones ideales para superar cualquier obstáculo. Eran tiempos muy distintos a los que se viven ahora, pero pudo más la fuerza de la razón que asistía a los trabajadores postales por constituir una representación sindical genuina.
Vale la pena recordar, a 38 años de distancia de aquella fausta fecha de nacimiento, los principales objetivos que constituyeron nuestra plataforma de acción , que han seguido siendo nuestra razón de ser como organización sindical: luchar permanentemente para elevar el nivel de vida de los trabajadores y sus familias, impulsando mejores salarios y prestaciones que no sólo complementen el ingreso económico, sino que sean también estímulo y reconocimiento a su trabajo con revisiones periódicas; fortalecer la unidad de nuestros agremiados con el objeto de preservar las fuentes de trabajo; luchar por elevar la capacidad técnica y administrativa de los trabajadores; promover, en beneficio de los agremiados, el cumplimiento del Contrato Colectivo de Trabajo, haciendo respetar el derecho laboral de los trabajadores sindicalizados; hacer valer, ante las autoridades del Servicio Postal Mexicano, “Correos de México”, la importancia y trascendencia de la participación sindical, no sólo como defensa de los derechos de los trabajadores, sino también como un Sindicato propositivo dispuesto a buscar, en coordinación con las autoridades, las mejores alternativas en los planes y programas del organismo.
Tenemos la plena certeza de que se han logrado conseguir y fortalecer estas metas. Y cabe mencionar que no ha sido una tarea fácil para quienes integramos el Comité Ejecutivo Nacional. Durante estos 38 años han surgido episodios que llegaron a colocar en peligro de sobrevivencia a nuestra organización sindical, pero gracias a la unidad, participación, compromiso y entrega de nuestros agremiados, pero también con el apoyo de la población, hemos salido airosos y fortalecidos para continuar el camino de lucha para reivindicar día a día el derecho que asiste a los trabajadores postales por conseguir mejores condiciones salariales que dignifiquen su vida y las de sus familias. Ese es nuestro compromiso.
Somos, y lo decimos con orgullo, una organización de vanguardia en el país. La inclusión de ideas y propuestas, sin taxativa alguna, se ha convertido en la piedra angular de nuestra unidad y cohesión, condiciones que también benefician al Organismo al que pertenecemos, pues somos trabajadores comprometidos con el desarrollo permanente del Servicio Postal Mexicano, institución de profundas raíces históricas y sociales en el país y reconocida por tolos los mexicanos y mexicanas. Estamos conscientes que si le va bien al Organismo, nos va bien a los trabajadores sindicalizados. Fomentaremos esa sinergia virtuosa, a través del incremento de la productividad y la eficiencia en nuestro trabajo diario, condiciones esenciales para continuar comunicando a todo México a través de la correspondencia que día a día recibimos y enviamos a los rincones más apartados de la nación.
Hasta la próxima.