Cada cuatro años, en este caso fueron cinco

, se celebran los donde la dedicación, el esfuerzo, el orgullo, el honor, la paz y la amistad agiganta aún más la particIpación de más de 10,000 deportistas de todas las naciones del mundo que con sus sueños hacen que el mundo sea mejor.

La emoción de participar, de la manera que sea en unos JJOO , como deportista, entrenador, como directivos, periodistas, colaboradores, ingenieros, arquitectos, publicistas, camarógrafos, obreros, empresarios, patrocinadores, cuerpo médico, jueces, árbitros, empleados de limpieza, policias, seguridad, choferes, familiares y un sinnúmero más de personas hacen que se logre el objetivo. Gracias Tokio por haber hecho un titánico esfuerzo y hacer este sueño realidad.

El representar los colores de tu país en una justa universal es una emoción única, pero al mismo tiempo el poder tener la oportunidad de vestir el uniforme deportivo con la bandera de tu país te hace sentir, hasta lo más fondo de tu ser, que todo tu esfuerzo, dedicación, disciplina, aprendizaje, tu arduo camino para llegar, así como la responsabilidad que representa hace que la condición humana y los valores que todos llevamos dentro tengan la prueba más trascendente e importante en una competencia llena de paz y unión.

La humildad es la capacidad que todos tenemos para reconocer limitaciones y debilidades con respecto a los demás. El deporte enseña a conocer el dolor de perder , por lo tanto se comprende el gozo cuando se gana.

La enorme difusión del deporte en los medios

,nos muestra la humildad que tienen todos aquellos que no han podido subirse al podium, los ahogos en llanto con la impotencia de no haber conseguido ese triunfo tan anhelado, al mismo tiempo nos muestra al ser humano que ha trabajado por estar en esa posición privilegiada de ganar o perder. Esa agonía, cansancio físico y mental, enojos, enfados, reclamos , frustraciones pero al mismo tiempo el reconocer el triunfo del adversario, de su júbilo en haber conseguido el triunfo. que al final de cuentas es una competencia y que para competir se debe uno de preparar y al final es ganar o perder.

Vamos, en el final de estos JJOO , felicitaciones, reconocimiento y agradecimiento a cada uno de los 160 deportistas mexicanos que compiten en Tokio con orgullo y dignidad portando los colores de nuestra bandera, así como nuestro respeto a cada uno de los deportistas mexicanos que históricamente han tenido la oportunidad de ser olímpicos o seleccionados en cualquier otra competencia y por haber tenido el honor de cumplir y de competir llevando el nombre de México tatuado en su corazón.

- luis@vamosdeportes.com

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