En el tiempo que atravesamos la continuidad de los negocios es un gran dilema, la pandemia como la estación de radio de la capital de la república mexicana 620 -en amplitud modulada- parece que llegó para quedarse y habrá que apechugar, al igual que otros eventos, de distinta índole, propiciando un alto grado de incertidumbre presente y a futuro.
Enfocarnos en crear valor al cliente a expensas de menor rentabilidad, invertir en la conversión de nuestro modelo de negocio con miras al crecimiento a largo plazo, sacrificando lo inmediato son entre otras las decisiones a plantear de cara al futuro, son decisiones inevitables y conllevan desde luego elecciones riesgosas.
La naturaleza de la elección de la estrategia a seguir es tensa, se trata de elegir continuidad o eventualmente detener la marcha del negocio, el dilema para organizaciones de todo tamaño involucrará cambios que van a permitir o no, enfrentar el futuro.
Es detenerse a pensar en lo que vamos a gestar, con base en lo que estamos viviendo y tratar de anticipar lo que estimamos pasará en los próximos tres años -por dar una idea de dimensión de tiempo- y que sería de acuerdo al negocio en el que estamos involucrados.
Un dilema representa la encrucijada en el camino que vamos a elegir y tendrá por consecuencia, un gran impacto con base en las decisiones que tomemos y mismas que ya no las podemos dilatar, dado que en diferentes aspectos políticos, económicos y sociales estamos viviendo tiempos muy complejos, que nos obligan a tomar rumbo.
Sabemos que la estrategia es referente a proponer opciones y tomar decisiones con miras a obtener buenos resultados en el futuro, entendiendo que es una decisión que implica que, no necesariamente el futuro será como lo imaginamos y si pudiéramos ser flexibles, es ir moldeando lo que hacemos y haremos de acuerdo a lo que acontece interna y externamente.
Es apostar entonces por crear agilidad, en quienes dirigen y operan la ejecución del día con día de la organización, generando capacidad de adaptación, con base en un modelo de negocio flexible y lo más simplificado posible, sustentado en una continua retroalimentación, pruebas y aprendizaje, de tal manera que la elección de decisiones sea más asertiva y adaptable.
Existen tensiones a resolver, entre crear valor al cliente sin menoscabo de sacrificar la rentabilidad; dirigir de arriba hacia abajo o viceversa; optimizar o innovar; escuchar al cliente o crear nueva demanda; dirigir con base en lo que sabemos internamente o con la voz del cliente; buscar el resultado positivo a largo plazo o el resultado del trimestre. Por cierto esto último de gran impacto en las empresas llamadas unicornio -al sobrepasar el valor de mil millones de dólares- cuya rentabilidad se vislumbra en el futuro lejano y no en el corto plazo.
Todas las afirmaciones anteriores, convertidas en preguntas, pudieran guiar en la preparación de la estrategia y tratar de resolver los dilemas que se nos presenten, preparados para ir lidiando con ellos y sus posibles consecuencias.
Cuando una contradicción se presenta y se elimina, el modelo de negocio se fortalece si logramos se ejecute con base en que nos hemos preparado, generando la habilidad de resolverla, contemplando al cliente como el centro de la razón de ser de nuestro negocio, desde luego, sin perder de vista los intereses de los demás interesados, en que la organización en el tiempo, sea para todos exitosa.
Abrir la capacidad de ir generando opciones, en lugar de ir posponiendo la toma de decisiones, es decir actuar y generar, en lugar de esperar y ver. Ser pues, proactivos y no reactivos, en medio de los cambios que estamos viviendo día con día, en el mercado, con el cliente, el avance de la tecnología y el ambiente político, económico y social.
Reflexionar en el propósito que, no solamente es perseguir el rendimiento económico y Grupo Pachuca que preside Jesús Martínez Patiño así lo asume y con la firma internacional de arquitectura, HKS, tiene contemplado el proyecto de construcción del nuevo estadio de León y que sea inaugurado el próximo 2023, aunque la construcción no ha sido iniciada, se prevé que arranque este año, albergará hasta 35 mil personas, además que será creado con el objetivo de que sea de uso múltiple.
La compañía HKS ha ganado prestigio mundial tras haber construido el Sofi Stadium, ahora considerado como el estadio más caro del mundo, la nueva casa de los Rams y Chargers, franquicias de la NFL.
Suena a teoría, sin embargo, del entendimiento que tengamos de la realidad presente y futura, dependerá que tanto seamos o no exitosos en el dinámico ambiente que, vivimos en este mundo, que nos toca permanecer en nuestra existencia. A darle que es mole de olla, no hay de otra.
