El pasado día 10 de diciembre de 2021, dentro de las instalaciones de La Antigua Escuela de Medicina de la UNAM, se llevó a cabo la Solemne Ceremonia de Doctorado Honoris Causa, donde se reconoció la gran y extensa trayectoria de Carlos Sandoval Olvera, Presidente del Consejo Nacional de Industriales Ecologistas A.C. (CONIECO), ingeniero civil egresado de la Universidad Nacional Autónoma de México, dedicado a la construcción de infraestructura ambiental, desarrollo sustentable y a la promoción de la cultura ecológica, para el bien de México y la sociedad.
Cabe mencionar que desde hace más de 100 años la UNAM, ha entregado el Doctorado Honoris Causa a personas que realizan labores excepcionales y que contribuyen en ámbitos como el conocimiento, la ciencia, la cultura, infraestructura y el profesionalismo. Carlos por su trayectoria, en promover un cambio de actitud hacia la naturaleza y preservar el medio ambiente; buscar la equidad social apoyando a empresas micro, pequeñas y medianas por medio de educación y capacitación para el cuidado del medio ambiente, lo tiene bien merecido.
El premio entregado por el Claustro Doctoral Honoris Causa, promueve y motiva el desarrollo y expansión de una industria ecologista, sustentable y funcional para la sociedad. Viendo al medio ambiente como un gran generador de empleos. Se anticipó, al entender desde hace muchos años, que el capitalismo convencional debe ajustarse al reconocimiento de su dimensión social y que el planeta tiene una capacidad limitada y que conforme crece la población, se consumen más cantidades de recursos dejando menos para las generaciones futuras, lo cual hoy se conoce como sustentabilidad.
La crisis como oportunidad, con paisajes destrozados por el desorden y la codicia, nos permite la ocasión de lograr un cambio de valores y contagiarnos de entusiasmo por limpiar y hacer más amable a nuestro planeta. Hace algunos años, un grupo de científicos ganadores del Premio Nobel, entre los que se encontraba el científico mexicano Mario Molina Henríquez , subrayaron la necesidad de actuar para reducir las emisiones de gases contaminantes, a la mitad hasta el 2050 y expusieron que en la actualidad se cuenta con tecnologías que, puedan ser más rentables a mediano y largo plazos, como la energía eólica, solar y los biocombustibles.
Hoy es oportuno escribirlo, pensando en un mejor futuro y recordando en México la creación hace varios años, del Consejo Nacional de Industriales Ecologistas, A.C. (CONIECO) promovido con gran entusiasmo por, el ingeniero Carlos Sandoval Olvera y otros pioneros, inspirados por la Cumbre de Río de Janeiro de 1992, la cual enfatizó las acciones concretas a favor del cambio climático.
Carlos hace muchos años me dijo: "los empresarios tenemos el compromiso con el medio ambiente y tenemos que hacer algo"; fue profético. Hoy cuentan con múltiples socios y el argumento es rotundo: convencer a los empresarios de que, protegerlo nos permitirá vivir mejor, ahorrar y ser más competitivos, Carlos, como presidente, y sus agremiados contribuyen a fomentar acciones a favor del ecosistema.
El CONIECO, ha dedicado su labor a convencer a los industriales de preservar el medio ambiente, aunque haya quienes se niegan a reconocerlo y prefieren como el avestruz, esconder la cabeza. La locomotora verde debe impulsar en México la conciencia del país por la sustentabilidad. "Ningún experimento es un fracaso total; como mínimo, sirve como un mal ejemplo", recuerda el Principio de Utilidad de la Ciencia.
Es el tiempo del piensa global, pero la llave del éxito, está en las manos de cada uno de los gobiernos locales y de sus habitantes, para emprender acciones tangibles que, a su vez transformen la manera de pensar y actuar. Dar ejemplo, de que existen mexicanos que amalgaman los intentos por contagiarnos de, entusiasmo por limpiar y hacer más amable a nuestro mundo, la casa de todos los que lo habitamos y que tenemos la responsabilidad de nunca olvidarlo, en aras de un futuro mejor, del presente que vivimos. A impulsar el cambio de mentalidad se ha dedicado Carlos y sus socios de la CONIECO, por eso, su emérito doctorado es muy merecido. Sea enhorabuena y goya, goya, Universidad.
