Los mexicanos, al igual que algunos, o muchos, países, hemos padecido, o padecemos, malos gobiernos. Aunque a más de alguno se le retuerzan las tripas, mientras fuimos colonia de España, junto con los otros virreinatos, (con las consiguientes fallas humanas), conformábamos el primer mundo de aquellos tiempos. Estábamos bastante mejor que los países europeos. Pero como a muchos no les conviene que esto se conozca, crearon y difundieron la Leyenda Negra, que presenta justamente lo contrario a la realidad. Los problemas se nos empezaron a presentar a partir de la independencia, cosa que no fue accidental, sino un perverso plan muy bien pensado por globalistas de aquellos tiempos. Pero ese es otro tema.

El caso es que después de 1810 hasta 1880, que Porfirio Díaz tomó las riendas, prácticamente vivimos un caos que nos ha ido hundiendo paulatinamente. (Y hoy nos quiere acabar de hundir de sopetón). Díaz con manos de hierro comenzó a pacificar al país y a reconstruirlo. Tuvo grandes logros, (tantos que hay quienes lo consideran el mejor presidente de la historia), pero también generó grandes injusticias, (aunque injusticias las encontramos por todas las naciones). Pero a los gobernantes de EU, que ya trabajaban para el globalismo, esto les disgustó. Y aprovechando algunos errores garrafales, apoyaron y armaron a sus opositores, con lo que y así se inició la destructiva y sangrienta Revolución. La cual concluyó hasta que Obregón, vendiendo a la patria aceptó todas las condiciones leoninas que le impusieron.

Luego que terminó el conflicto armado, en su lucha por el poder, los caudillos triunfantes empezaron a matarse entre sí. Entonces, el embajador gringo, Dwight Morrow, los convocó para recomendarles que, en lugar de matarse, mejor tuvieran un acuerdo, fundaran un partido y se repartieran pacíficamente el botín. Y surgió el ahora PRI. Así mataron dos pájaros de un tiro: disminuyeron nuestra planta productiva y obtuvieron la prerrogativa de palomear a nuestros gobernantes. Claro que esto lo callan. Lo presentan como el constructor del México próspero, en crecimiento económico acelerado, sostenido, sustentable, equitativo y demás ensoñaciones. La hipocresía y la mentira, no son exclusividad de la 4T.

Y con este bonito partido, se montó una dictadura de 80 años, que, salvo los cristeros, los estudiantes del 68 y unas cuantas manifestaciones menores de inconformidad, la población aguantó estoicamente callada. Por eso, este 13 de noviembre de 2022, es histórico. Por fin hay movimiento fuerte de la sociedad. Más del millón salieron a la calle para manifestar su inconformidad y defender al INE, piedra angular de nuestra incipiente democracia. Ya que desde la presidencia se pretende desmantelarlo, para que las elecciones sean como las de antes. Pero como el embate contra el INE, es tan solo una de tantas acciones dañinas surgidas desde palacio. Ahora, como todo gobierno marxista, considera que la religión es el “opio del pueblo”, por lo que ya comenzó a reprimirla. Y aunque oficialmente el triunfal striptease conservador, fue en defensa del INE, en realidad fue para defender integralmente a México.

Aunque, esto fue un inesperado éxito de la sociedad, es apenas el primer paso, de alguien que está aprendiendo a caminar, pero que le urge correr. Porque esta, ya es una guerra en toda forma. Una sociedad despierta pesa más que una gavilla de arribistas encabezados por un politiquero aspiracionista a dictador. Nada más que en la lucha contra el marxismo, el peso de la sociedad tiene caducidad. Si reacciona a destiempo, y la dictadura llega a cierto punto, ya tendrán al comunismo para muchos años, prácticamente hasta que interiormente se derrumbe sola. Una vez empoderado impedirá, de muchas formas, que la sociedad pueda organizarse para redimirse. Desde hace años los cubanos, venezolanos y nicaragüenses, ya no pueden hacer nada para liberarse de su doloroso yugo. Ya son ranas bien cocinadas. Y para colmo de males, han buscado la ayuda del mundo, pero solo para constatar, que la solidaridad internacional, ya sea por indiferencia o por complicidad abierta o encubierta, es inexistente.

Es una lucha contra un enemigo que, se encuentra atrincherado, nada menos, que, en la presidencia, y aunque prácticamente no la ejerce, pues más bien se desempeña como Vocero Mañanero de la Presidencia y, como es su costumbre, violando la ley, es el principal promotor electoral del partido de su propiedad. Solo ocasionalmente, se desempeña como presidente, cuando le conviene, ya sea para “autorizarse” alguna partida y poder autoaportarse algún cash, usar las facultades presidenciales para desmantelar, neutralizar o infiltrar algún organismo autónomo que le moleste o le caiga gordo o bien cometer alguna tropelía, que le ayude a su movimiento, suyo de él. A lo largo de estos 4 años, ha demostrado de mil formas; que la sociedad con sus carencias y sufrimientos le importa un bledo. Que su amor por los pobres, consiste en multiplicarlos. Qué él no vino a buscar el bien de la patria, sino que vino por su dictadura y en eso está al ocupado al 100%. Y para ayudarse busca la forma de sacar la mayor cantidad de cash al erario.

Para poder derrotar a un enemigo que, prácticamente concentra en su sacra persona los tres poderes y que, además, compró la lealtad del ejército y cuenta con la violencia del narco, es hueso muy duro de roer. Por eso es indispensable que la sociedad entienda que esta, es una verdadera guerra, para que reaccionando en masa, se una, ejecute las estrategias bélicas y sociales adecuadas oportunamente.

Por esto, en primerísimo lugar es indispensable, que los patriotas conscientes se mantengan bien informados y compartan sus “Estos Datos”. Que se agrupen y contagien su entusiasmo a los tibios y apáticos que se encuentren en su metro cuadrado y mantengan la moral alta. Desde luego, es importante insistir, en que, al contrario de la demagogia que se cimenta en la falsedad y manipulación, debe fundamente en la verdad y en los auténticos valores del ser humano. Ojo. Esto no es catecismo, ni lecciones infantiles de valores, que luego los adultos no observan. Ya que, aunque parezca mentira, la fuerza y el fruto de todo movimiento social se, asienta sobre su solides moral.

Lo más importante de todo, es tener presente que se requeterequiere de mucha, pero mucha participación social. A mayor participación social, mayores posibilidades de construir un país próspero y razonablemente justo. Obviamente que forzosamente precisa de auténticos líderes sociales, íntegros, sensibles, patriotas, abiertos al diálogo, con valores elevados, capacidad de organización. Desligados de cualquier remedo de partido y desde luego, que no tengan ni siquiera un asomo de rabito por donde el enemigo los pueda doblegar. Que sepa trabajar en equipo. Así mismo se requiere de un equipo integrado por ciudadanos de la misma categoría para encabezar, organizar y motivar a la sociedad en la contienda.

Urge establecer cuanto antes, estrategias que de inmediato, impidan que se acabe de apuñalar al INE, (le recortaron recursos para impedir que funcione, para acusarlo de inepto), y se carnalice al tribunal electoral. Así mismo urge, parar o neutralizar los ataques contra la libertad religiosa, porque, como en otras partes del mundo, aquí ya arrancaron abiertamente. Y aunque esto, es otro tema, cabe mencionar que el mal tiene metida su cola en todo esto y más. Si se logra que la sociedad siga despertando y se organice, claro que, estará en posibilidades de ir frenando ya tanta destrucción, necedades, ocurrencias y odio contra México.

En el 68 la prensa y la mayoría de comunicadores estuvieron de parte del gobierno y del engaño. Faltando al auténtico periodismo, divulgaron las mentiras oficiales, distorsionaron, callaron y ocultaron los hechos, en forma tan descarada que los muchachos a lo largo del movimiento, acusaron a la “prensa vendida”, la cual mantuvo desinformado al público. Y hoy sucede lo mismo, pocos medios tienen el valor y el patriotismo de informar y comentar con verdad del proceder de “este régimen adversario”, (la 4T). Otra vez nos estamos encontrado con esa prensa perversa que, faltando a la verdad, traiciona a México, sin pensar que está contribuyendo en la destrucción de la patria de sus hijos, hermanos y demás parentela. Con una gran diferencia, en aquellos tiempos no existían las redes sociales para hacerles contrapeso, pero hoy ahí están como un bastión poderoso para informar lo que quieren ocultar o distorsionar y amortiguar su mala influencia. Es vital neutralizar a esos enemigos de la verdad y decidir qué hacer con ellos. La verdad molesta en palacio. Hace tiempo, desde la mañanera se ofendió a algunos informadores, que con bravura se atrevieron a publicar algunas de sus politiquerías o “travesuras”, calificándolos como “la zopilotada”, nada más que al ofensor, se le olvidó que los zopilotes sobrevuelan justo donde hay carroña.

En algunos lugares donde se realizó la triunfal caricatura de marcha, como despectivamente denominó una de las Corcholatas, faltaron jóvenes. Predominaron los viejitos. Tal vez, porque ellos, vivieron en carne propia la dictadura priista y la sangrienta represión estudiantil. Hay que revisar si, es verdad su apatía e indiferencia, para atenderla inmediatamente, si así es, ya que ellos, no son los que recibirán la estafeta, sino que, son ellos los que ya la están recibiendo y si no reaccionan adecuadamente, corren el gran riesgo de vivir bajo una dictadura marxicastrochavista.

Es demasiado visible que el órgano que debería ser independiente para legislar, por ser mayoría morenista, funciona como una oficialía de partes del ejecutivo, solo para secundarlo, aprobando sin cambiar ni una coma, propuesta de ley que les encomiende. El Judicial que también debería ser independiente para libremente y apegado a la ley, vigile el cumplimiento de la Constitución y no sea modificada por capricho. Igualmente, proteger al ciudadano de abusos, atropellos o antojos del gobernante y delimitar el poder de la autoridad. Pero desgraciadamente, por la traición de algunos magistrados, el Poder Judicial ha quedado convertido en tapadera y cómplice carnal del Ejecutivo. Ahora, el Ejecutivo es el cabecilla de un trío traidor. Además, reforzado por un grupo de directores de instituciones que fueron creadas con autonomía, para vigilar y proteger algunas situaciones específicas, pero que, hoy ya el Ejecutivo neutralizó, desvirtuó, infiltró con títeres a su servicio incondicional o está atacando de alguna forma. Entre otras; Banco de México, INEGI, CNDH y el intocable INE.

Para esto, la ciudadanía consciente y patriota podría presionar con cartas, plantones y manifestaciones a diputados, senadores, magistrados, gobernadores, alcaldes, directores serviles de las instituciones violentadas, que por su propia voluntad o con el brazo torcido, apoyan pasiva o activamente, los embates contra la patria. Y por el contrario brindarles apoyo y reconocimiento a aquellos funcionarios valientes, que, arriesgando el puesto, o quizá hasta la vida, obran en conciencia, apegándose a la verdad y la justicia, sin alinearse con nadie.

Además, es necesario se les ponga un cuete en sana parte, a los partidos políticos que deberían ser oposición, para que finalmente se muevan y cumplan con su papel, en este peligroso momento de nuestra patria, que desechen a los líderes floreros que no estén a la altura requerida para enfrentar a “este régimen adversario” o que tengan una cola tan larga de donde los puedan agarrar para forzarlos. Ya se vio, que la sociedad pesa, jugó un papel muy importante cuando, apoyó y presionó a los legisladores de la oposición, para que desecharan la arcaica Reforma Energética presidencial.

Para el 24, la sociedad debe presionar para que los 4 partidos de “oposición”, se dejen de estupideces y traiciones, se presenten en alianza ante la nefasta 4T, la cual es indispensable para lograr la victoria. Si alguno no quiere, que pinte su raya y se vaya con los de enfrente.

Se necesita desarrollar campañas adecuadas para tratar de concientizar a los abstencionistas, ya que son el partido mayoritario y su voto es importante para salvar a su patria, de la transformación maligna que la amenaza, la cual con su abstencionismo se puede consolidar.

Hay que entender que no todos los legisladores tienen los conocimientos, como los que pudieran tener los magistrados que ostentan un título, aunque bien pudiera ser que más de alguno de ellos no esté respaldado por los conocimientos requeridos y que también hayan pasado de noche por la universidad, por lo tanto, hay legisladores, así como adoradores del presidente, que carecen de la cultura y preparación suficiente para comprender que es lo que está sucediendo y de que aprovechándose de su ignorancia los están usando, para implantar el proyecto insensible y egocéntrico de un solo individuo, en contra los verdaderos intereses de México y de los suyos. Por lo que es urgente, buscar la forma de llegar a ellos y hacerles ver, con peras y manzanas, la realidad.

El movimiento también requiere contar con políticos honestos, patriotas, inteligentes, preparados, sensibles, humanos y sin rabos pisables. Por eso es necesario ponerse a buscarlos con cuidado, porque los políticos de alta calidad son escasos. Si los hay, pero hay que encontrarlos. Para que, así juntos sociedad civil y políticos, bajo la supervisión del INE, nos enfrentemos en las elecciones del 24 a los nefastos de “este régimen adversario”. Los derrotemos, los reemplacemos y podamos empezar la reconstrucción, tomando en cuenta que el próximo sexenio, va a estar muy pesado porque el país estará seriamente dañado. Tal vez esto suene a utopía, porque los humanos somos tremendos, especialmente en cuestiones de poder. Por eso hay que apuntar muy arriba. Además, los países progresistas con buenos gobernantes, si existen.

Pero es necesario recalcar que para llegar a ese ansiado hecho hay mucho por hacer. Fue excelente y esperanzador que en varias ciudades más del millón, por fin se hayan decidido a manifestarse. Pero no se puede echar las campanas al vuelo. Eso apenas fue el primer paso, si bien muy significativo y esperanzador,es apenas la muestra de que la sociedad esta dispuesta para esta guerra, que en forma velada nos declararon en julio del 2018. Pero apenas son estamos poniendo en pie de lucha, mientras que el enemigo ya tiene 4 años de ataques. Pero estamos a tiempo, todavía es buena hora para enfrentarlo. Hay que tener muy presente, que es un contrincante muy fuerte, ya que cuenta con todo el poder del Estado y buena parte de su cash y que, adicionalmente, cuenta con el narco, así que se requiere sociedad, sociedad y más sociedad para la victoria.

Cada día es más claro que hay dos bandos.

De un lado está el presidente con su destructiva 4T, apoyado por sus lacayos con su lealtad a ciegas por él y una turba que por su ignorancia o por inspiración intestinal, son sus partidarios, lo cual con frecuencia manifiestan en forma agresiva y soez. Y una masa de apáticos e indiferentes, que, con su pasividad irresponsable, apoyan la tiranía. Mientras del otro se encuentran mexicanos trabajadores, aspiracionistas que aspiran por una patria en camino del progreso y el bienestar verdadero para todos, de derechistas que son derechos y quieren que sus derechos se respeten, de conservadores que quieren conservar al país que heredarán a sus descendientes y sus valores tradicionales.

En el 2000 se podría pensar que íbamos a ser la generación que liberaría a México de la dictadura priista. Parecía que íbamos bien, pero algo debimos haber hecho mal, ya que hoy estamos a punto de ser la generación que hereda a la siguiente, una dictadura de un PRI revolcado, mucho más atroz que la del régimen anterior.

Ahora que finalmente la sociedad decidió manifestarse y que acepto el reto, la moneda está en el aire. Y al final de esta lucha, o ellos aparecerán solos en el estercolero de la historia por sus malas intenciones o, si no logramos vencerlos, ambos iremos a parar allá. Unos por perversos y los otros, perdonando el término y la franqueza, la cual también me pega, por pendejos. Lo bueno es que la sociedad tenemos la palabra, pero no la que sale de la lengua, sino la de la acción. La historia espera.

Google News

TEMAS RELACIONADOS