Arrancó el nuevo sexenio, que no tiene nada nuevo, pues es continuación del anterior. Por un lado, seguirán afanados en culminar la implantación de la tiranía globalista y del otro, hay claros indicios del inicio de un Maximato más servil que el de Plutarco, pues el “Jefe Máximo de la Trastornación” es mucho más egocéntrico, soberbio, inhumano y tiránico, quien encontró alguien que, hasta ahorita, renunciando a su dignidad humana, lo obedece ciega y servilmente hasta la ignominia. Para maniatarla, le impuso un gabinete de incondicionales y como cereza del pastel, le incrustó al “aspiracionista” a Andrés Manuel II, que en su “testamento político” ya lo “decretó” como presidente para 2030.
Lo preocupante, es que ya aparecieron las malas señales. Hace seis años, el país estaba bastante mejor, la 4T nos sobajó, y como vamos, de no reaccionar, en 2030 estaremos mucho peor. Desde el primer día, la violencia manifestó su poderosa presencia. Con la decapitación del alcalde de Chilpancingo, somos noticia mundial. Estamos en la lista de países peligrosos, así que turismo e inversiones bajarán. La violencia se incrementó automáticamente y eso que, la prensa vendida, oculta parte. El controvertido Omar García Harfush, nuevo encargado de la “seguridad”, (quien, según investigación de Anabel Hernández, como buen “cuatrotero” tiene nexos con el narco), ya anunció oficialmente que los abrazos a malosos continuarán, lo significa que la violencia seguirá creciendo ¡que Dios agarre confesados! Nada más que para que nos agarre confesados, debemos confesarnos.
Como al pueblo bueno y sabio, (según YSQ y lacayos), le urge que antes que nada, reformen al Poder Judicial, aunque se destruya a la República, todos los lacayos están “afanadísimos en, que a como dé lugar, el único poder que aún es soberano, quede bajo el control del Ejecutivo. Como lo están haciendo a velocidad supersónica y con las patas, su iniciativa, solo por sus errores es inaplicable. Los serviles luchan fervorosamente por su hueso. Tenemos un doctor en derecho constitucional, que, mientras en las aulas de la UNAM defiende la Constitución, la pisotea en el Senado. El camarada patán José Gerardo Rodolfo del Niño Andrés Fernández Noroña, (quien se siente soñado presidiendo el Senado), amenaza que, por encima de todo, establecerán su reforma y se cree con derecho a ofender y usar la fuerza del Estado contra quien lo vea feo. El Senado lacayo, gracias a la traición de los Yunes, logró aprobarla, y dos horas después ya los congresos locales controlados por el MOREPRIAN, sin siquiera leer la introducción, por obediencia empezaron aprobarla uno tras otro. Pero resulta que hay un Heroico Poder Judicial, que, aunque tiene infiltradas a una magistrada pirata, una carretonera muy ignorante y otra servil; patrióticamente lucha para apegarse a la Constitución y defenderla contra su violación y desmantelamiento; así que valientemente aceptó revisar el proyecto “reformador”. También intervendrá la Comisión Interamericana de Derechos Humanos. Como los ideólogos socialistas encargados del proyecto, la elaboraron con tanta velocidad que les quedó tan mal, que, de aprobarse, sería inaplicable, ya que contiene artículos contradictorios. Lo que está por verse es, si el Ejecutivo y las instituciones bajo su dominio, acatan sus disposiciones o se pitorrean de ellas como ya es su costumbrita desde el 2018, por aquello de: “no me vengan conque la Ley es la ley”. En ese caso estallaría problema social sumamente riesgoso.
También se escucha que la “Subpresidenta” continuará endeudándonos con el extranjero. Necesita cubrir los despilfarros sin beneficio, realizados en el anterior sexenio, que no dejó ni siquiera una obrita regular rescatable. En campaña, el depredador, falazmente prometió, que no nos endeudaría, pero nos enjaretó una deuda mayor que la peor de los neoliberales. Además, se viene la “crisis del error del sexenio”, ocasionada por el saqueo de todo lo “saqueable”, que seguramente incrementará el endeudamiento excesivo.
Hay muchas incógnitas por resolver y amenazas que penden sobre el futuro de nuestro país. El sexenio empezó mal, con un México degradado en muchos aspectos, empezando con la violencia que padece la población (y
también los “traviesos” abrazados), no se sabe, si el Maximato durara todo el mandato o solo un tiempecito, ni si es peor una “Subpresidenta” o una Presidenta. Pues ambos son personas dañinas: no escuchan, no razonan, son insensibles, hipócritas, tramposos, frías, crueles, prepotentes, mentirosos y demás. Trabajan arduamente para esclavizarnos con el “comunismo” del foro paulino. Por eso, mal empieza la semana para quien ahorcan en lunes. Lo bueno es que hay esperanza pues hay varios frentes en los que, si reaccionamos adecuadamente, podríamos derrotarlos.
Ecos del sexenio fatal. El Fariseo Socialista se declaró enemigo de que los expresidentes tuvieran privilegios, pensiones y escoltas. Que, si querían seguridad, la pagaran ellos. Pero se le “olvidó” y como “La Chingada” se encuentra en un estado dominado por delincuentes “abrazados”, por seguridad suya, “de él” y la de su familia, mandó instalar un cuartel a tres pasos, pues eso es más seguro que una escoltita cuidando su hogar. Además, como está enfermito y nos prometió un servicio médico como Dinamarca, (cosa que no cumplió, pero si desgració el sistema de salud), consideró que, su promesa se cumpliera, al menos, en algún rinconcito del país, (cercano a su corazón enfermo), así que se mandó construir un hospital del ISSSTE de solo veinte camas, (para que más, si su familia es pequeña), equipado como los mejores hospitales daneses; cuyo costo por cama fue de $35’000,000, mientras que las de los hospitales para el pueblo bueno y sabio, cuesta entre doce y quince millones. Pero este es un hospital VIP para “privilegiados”. Además, como es injusto que solamente los neoliberales y conservadores disfruten de lo bueno; pavimentó con buen concreto los alrededores. (Y la oposición calladita). Como a los capos socialistas les gusta “el buen vivir”, olvidando la pregonada austeridad republicana y pobreza franciscana, mandó realizar obras “aburguesadas”, que la han convertido en tal paraíso, que ya no podremos mandar a la Chingada a nuestros enemigos, porque estaríamos enviándolos a un paraíso fifí de refinado gusto clasista.
Y los socialistas son muy curiositos, se molestan con los comunicadores que publican o comentan las barbaridades, atropellos, corruptelas y fallas garrafales que ellos cometen, pero quienes resultamos perjudicados de sus acciones perversas, tenemos que aguantarnos, si nos oponemos o brincamos somos traidores conservadores, enemigos de su gobierno. No podemos quejarnos, ni inconformarnos. Así son todos los fariseos socialistas.
El caso es, que ya están en plena construcción del segundo piso de la Trastornación y aunque, hasta ahorita, pareciera que, mediante un gigantesco fraude electoral, ya lograron imponernos una “Subpresidenta”, congresos, gobernadores y alcaldes incondicionales y parezca todo perdido, no debemos abandonar la lucha, pues aún tenemos posibilidades, ya que están cometiendo errores garrafales y metiéndose en problemas. Ya hay pruebas fehacientes de su “megafraude” electoral. El proyecto de reforma al Poder Judicial es un bodrio. Casi todos los principales personeros, de este maligno movimiento, empezando por su cabecilla, tienen cola que les pisen, algunos aparecen en investigaciones estadounidenses sobre narco, están publicitándose muchos escándalos por corrupción, nepotismo, información privilegiada y más. Organismos internacionales están aceptando nuestras demandas ciudadanas. En fin, hay muchos frentes por los cuales podemos defendernos, no olvidemos que somos la generación que debimos haber liberado a México de la dictadura priista y que, con nuestra inacción, las fallas del PAN y otros factores, estamos a punto de ser la generación que dejará instalada la dictadura del MOREPRIAN, que es un PRI “comunistoide” empeorado. Que se trata de una lucha entre bien y mal. (Por eso su rito chamánico). El bien finalmente ganará, pero que para eso suceda pronto, tenemos que unirnos y hacer adecuadamente lo que nos corresponde. Contamos con ocho heroicos magistrados de la SCJN. Si no actuamos pronto, lo lamentaremos y nuestros hijos y nietos lo pagarán. Pero, aunque no queda mucho plazo, estamos a tiempo.