No cabe duda que los problemas pueden resultar una magnífica oportunidad para avanzar. La historia nos dice que, salvo honrosas excepciones, hemos sido un pueblo más bien agachón. Somos la generación que debimos liberar a México de la “dictadura” priista. Si bien lo logramos por dos sexenios, como no hicimos lo debido, no solo permitimos que regresara, sino que le abrimos la puerta a algo peor: Morena. Un PRI, mucho más virulento y perverso, que pretende encadenarnos al imperialismo marxista. Lo bueno es que todavía estamos a tiempo de salvarnos, pero urge que reaccionemos.
Enfrentamos al enemigo más peligroso y destructivo de nuestra historia. Nos ha pegado por todos lados. La lista de males es demasiado larga y no tiene caso relacionarla. Tan salta a la vista que, hasta alguien con deficiencia visual aguda, podría verla. Aunque nos esté causando grandes perjuicios y enfrentemos a un enemigo muy poderoso y maligno, a la larga los beneficios pueden ser mayores. Sus perjuicios son tan graves, que, harían reaccionar hasta un muerto. ¨Por eso estamos empezando a reaccionar. Ya logramos algunas victorias tangibles. Somos más fuertes, que los supuestos partiditos políticos de oposición.
Ante el poder inmenso de “YSQ” y sus lacayos, está visto que los partidos opositores, necesitan “aliarse” para derrotarlo. Como en el pasado fueron enemigos mortales o tienen principios opuestos, es difícil digerirlo. Pero, ante el enorme peligro que representa el poder y perversidad de “Su Alteza Distintísima”, es indispensable. Aunque hay radicales que reprueban esto.
Si bien, ahora la sociedad pesa más que esos partiditos de oposición, no es algo muy meritorio. El PAN no es el PAN. Por eso ha perdido simpatizantes. Se alió perversamente con Morena y demás partidos en bloque, para limitar las facultades del TEPJF, para, entre otros abusos, tener manos libres en el manejo de la lana. Pero dieron marcha atrás, porque la sociedad se inconformó. Esto prueba que ningún partido es confiable.
De aquel todopoderoso PRI, solo queda un “chisguete”. Gran cantidad de su basura brincó a Morena y aunque quedó gente positiva, la tradicional se adueñó del poder y siguió siendo poco confiable. En varias situaciones críticas, nos tuvo en la incertidumbre de si traicionaba o no. El PRD, (otro derivado priista), en masa “chapulineó” a Morena, quedando empequeñecido. Esto, aunado a la creciente fortaleza social, les ha quitado poder. Aunque desprestigiados, son indispensables. Para sobrevivir: el PAN necesita retomar sus principios. PRI y PRD requieren reinventarse, conforme al interés social. Lo grave, es que no parece interesarles.
Como valerosamente, la SCJN, en varias ocasiones, ha impedido que, desde Palacio, violen la Constitución, juega un papel vital en estos momentos críticos. Lo notable es que, como de un lado Norma Piña encabeza al Poder Judicial y del electoral el volcán Xóchitl, surge un fenómeno inédito, dos mujeres son las piezas clave en este momento. Dos mujeres que pasarán a la historia, como las muletas que nos sostienen en este crítico momento. Falta conocer el desenlace.
Si bien, Xóchitl, ha sido candidata panista, ni es miembro activo, ni muy del agrado de los directivos. Pero, como la sociedad fue quien le pidió que participara y, sorprendentemente, ha despertado gran esperanza y entusiasmo en un importante segmento social, muy probablemente, será aclamada candidata.
Además, hay otro dato notable. Si Xóchitl llega a la presidencia, será la versión femenina, del “aspiracionista” Juárez, que de pastor llegó a presidente. Ambos son verdaderos indígenas, (comprobado con “indigenómetro”), que vienen desde la pobreza extrema. Él, cuidaba ovejas; ella vendía gelatinas y tamales descalza. Aunque tuvieron el mismo origen, existen diferencias abismales. Muchos ignoran, que Juárez, nunca superó sus complejos y resentimientos, por lo que discriminaba a los indígenas. Y como presidente causó muchos males al país, especialmente a los más desprotegidos, al quitarles los servicios gratuitos de las instituciones caritativas católicas. Pero es otro tema.
Xóchitl en cambio, parece que, con su pobreza, adquirió una sensibilidad y un sentido profundo de la vida. Es una mujer feliz, que sabe bromear. Con sus ganancias empresariales, financia una fundación que, más allá de solo lengua, apoya a sus hermanos. Y como funcionaria, obtuvo grandes beneficios para muchas comunidades indígenas. Por eso conecta e inspira confianza. Esperamos que no nos falle.
Su enorme aceptación crece día con día, (fue la primera obteniendo las 150,000 firmas), pinta, que, tiene muchas posibilidades de convertirse en presidente y que se ocupará en buscar el bien. Por eso, se ha opuesto a decisiones presidenciales nocivas. Se ve que es sensible, transparente, espontánea, íntegra y veraz, que busca el bien, que sabe tener éxito, por lo que esperamos será una presidente exitosa y que verdaderamente logrará beneficios para todos, especialmente para los más desprotegidos.
Aunque cabe mencionar que, con el “argumento” de que la mujer tiene derecho a decidir sobre su cuerpo, justifica que la madre decida si, al cuerpo del hijo, que se encuentra dentro del suyo, le permite vivir o no. ¿Ella aceptaría que su madre fuera, la que decidiera si nacía o no?
También apoya al movimiento LGBTTTBMKJYUIHRWW. Una cosa es que respetemos el derecho a tener los gustos sexuales que queramos y otra que apoyemos un movimiento que genera caos, violencia, impone sus reglas y atenta contra la inocencia de los niños.
Tenemos estas dos extraordinarias muletas, que, aunque les asiste la razón, no tienen tanto poder, por lo que sufrirán ataques de forma ruin, sucia, ilegal e inmoral. Muy especialmente Xóchitl, pues representa mayor peligro, ya que no es difícil que, venza a la corcholata y el “Destapador Supremo”, al quedar sin poder, teme que se le pidan cuentas. Está “apanicado” y una fiera inmoral acorralada es mucho más peligrosa, y esta, cuenta con todo el peso del estado, así que utilizará lo permitido y no permitido, para dejarla fuera de combate. Por eso necesitamos cuidarlas y brindarles un fuerte apoyo colectivo.
En su mañanera ya dijo textualmente: “Ojalá me entiendan los del INE y del Tribunal Electoral, para que no me vayan a sancionar, es muy importante que se sepa, que no existe ningún fenómeno político, que pueda implicar, el que pretenda, que se frene, se detenga, sea derrotada la transformación, el movimiento de transformación.” Al buen entendedor esta amenaza, es entendible. Su “trastornación” está por encima de absolutamente todo.
Por eso, es urgente la participación social masiva y activa. Si no, padeceremos lo que los cubanos, venezolanos y nicaragüenses.