No es por intrigar pero Jenni Rivera revivirá musicalmente con un disco conmemorativo de su décimo segundo aniversario luctuoso. Se dice que serán temas inéditos que forman parte del acervo conservado por sus herederos. Son 12 temas, algunos grabados en inglés, que serán lanzados en diciembre.
Actualmente, los hijos de Jenni son quienes se encargan de regentar la marca registrada de su madre. La administración de la herencia y legado de la fallecida estrella fue asignada a Jacqie, la hija de en medio. Los demás hijos son el consejo directivo y los que votan para las decisiones: Janney (Chiquis), Michael, Jenicka y Johnny, quienes han tomado posesión de toda la herencia de su madre. En medio, están los múltiples desacuerdos familiares de nietos con hijos, entre hermanos, y hasta entre sus padres.
La estirpe de los Rivera continúa siendo blanco de escándalo y presa de los juzgados, con sus familiares demandados unos contra otros. La semana pasada fue develada su estrella en el Paseo de la Fama en Hollywood, lo que nadie vio fue cómo se dio el milagro del acercamiento entre los que estuvieron distanciados. Cuentan que fue “Chiquis” quien tuvo la idea de buscar a sus tíos, primos, sobrinos y abuelos para asistir a la gran tarde de la develación de la estrella de Jenni. Definitivamente fue un buen momento, si bien no para reconciliaciones, sí para celebrar a quereres comunes.
La hermana de la cantante, Rosie Rivera, llegó con Doña Rosa Rivera, quien rompió en llanto arrodillada en la estrella. Lupillo y Juan, los otros hermanos, fueron discretos pero se mostraron conmovidos. Invitados aseguraron que no se saludaron entre sí pero que estuvieron presentes en la comida posterior a la develación y que fue ahí que se rompieron algunas barreras. Doña Rosa (la abuela) y Chiquis se dieron un abrazo y lloraron juntas de emoción. Rosie (la tía destituida como albacea del patrimonio) también se conmovió hasta las lágrimas con el acercamiento de sus sobrinos y prometieron reunirse pronto para un almuerzo de domingo.
Más allá de “dimes y diretes”, el amor consanguíneo siempre pesará más que cualquier diferencia de opiniones. Tal vez, considerar que las relaciones fracturadas se reconstruyan con este reencuentro sería aventurado pero podría ser un gran comienzo para ir curando viejas heridas.
Dolores Janney Rivera Saavedra nació en Long Beach, California, el 2 de Julio de 1969 y falleció el 9 de diciembre de 2012 en Iturbide, Nuevo León. Desde muy pequeña sintió gran atracción por la música desde sus dos idiomas: español e inglés y le ayudaba a su padre Pedro Rivera a vender cassettes de los artistas de su compañía Cintas Acuario. En 1984 quedó embarazada de su entonces pareja José Trinidad Marín Quintero, motivo por el cual quedó distanciada de sus padres. En 1985 nació su primera hija Janney “Chiquis” Marín Rivera y años después nacieron sus hijos Jaqueline y Michael. En 1992, Jenni se separó de Marín por los abusos y prohibiciones que vivía con él.
Rivera estudió una carrera en administración y se dedicó a ser vendedora de bienes raíces antes de comenzar su carrera en el mundo de la música. Entre 1993 y 1994 grabó dos discos: uno con sus hermanos y otro con el grupo Viajeros del Norte, pero ambos obtuvieron nula difusión, hasta que en 1995 con su disco “La Chacalosa” comenzó a llamar la atención del público de Los Ángeles, al ser una de las primeras mujeres en grabar narcocorridos, los cuales generalmente eran grabados por artistas masculinos.
Hasta hoy, ha vendido más de 30 millones de discos. A lo largo de su carrera realizó 13 álbumes de estudio, ocho recopilatorios (cuatro de ellos publicados post mortem), nueve álbumes en vivo (también cuatro de ellos después de su muerte), 35 sencillos en vida y 11 en los años posteriores a su fallecimiento.
Fue nominada a 113 premios y ganó 69 de ellos. Entre estos se encuentran 22 premios Billboard de la Música Latina, 18 premios Lo Nuestro, 11 premios Billboard de la Música Mexicana y un Premio BMI, por mencionar algunos. Es así como se inmortalizan los verdaderos ídolos, cuando el amor los sigue hasta después de dejar de vivir. Por eso es que Jenni Rivera nunca morirá, para efectos de trascendencia popular.
Y para cerrar, la actitud de Belinda ante los medios de comunicación, lejos de acercarla, la enemista con ellos. Luego del famoso incidente de su supuesta huida de un evento metida en una maleta, ahora la cantante corrió entre guardias de seguridad para escapar de la prensa en el Aeropuerto de nuestra capital mexicana. Alguien le tiene que explicar que su crisis de imagen es más profunda que el Mar Adriático.
PREGUNTA DE LA SEMANA PASADA: ¿Conductora que todavía no entra a “La casa de los famosos” y ya le volvió a caer mal todos?
RESPUESTA DE LA SEMANA PASADA: Shanik Berman.
PREGUNTA DE LA SEMANA: ¿Cantante a quien le pidieron reposo y no está obedeciendo al médico?
