Ayer, aquí en El Gran Diario de México se publicaron los resultados de la encuesta levantada por Buendía & Márquez de posibles candidatos presidenciales.
Los datos coinciden con otros estudios que muestran una cómoda ventaja para Claudia Sheinbaum y el oficialismo a unos 240 días de la elección presidencial.
Sheinbaum se lleva el 50% de preferencia, Xóchitl se queda con el 20% y hay un voto que se disuelve entre los punteros para darle a Samuel García, de un Movimiento Ciudadano que irá solo, un 7% y al ultraderechista Eduardo Verástegui un 4%.
Las encuestas son una foto del momento y justamente este no ha sido el mejor para Xóchitl Gálvez; desde las decenas de ataques presidenciales, la intensa campaña de odio desatada por bots en las redes sociales y el último escándalo por omitir referencias en su trabajo para obtener su título como ingeniera. Todo, todo esto se ha convertido en rechazo y pocas sumas de simpatías para la candidata del Frente Amplio Opositor.
Sin embargo, aún falta mucho, treinta puntos pueden remontarse en una elección tan polarizada como la que se antoja en 2024, faltan aún muchos elementos por definirse. Un claro ejemplo es Samuel García que podría, al final, no ser el candidato presidencial de Movimiento Ciudadano, ya sea por los impedimentos legales del Congreso o porque, ya de último momento, se dé cuenta del suicidio político que representaría una casi segura derrota. ¿Podría regresar orondo, altivo, a Nuevo León siendo una copia del Bronco al que metió a la cárcel?
Eduardo Verástegui, el ultramontano, es otro factor interesante a considerar. Hasta hace unos días apenas llevaba unas 20 mil firmas de las más de 960 mil que necesita para poder ser candidato independiente y que deberá reunir a más tardar el próximo 6 de enero. De hecho, si su crecimiento sigue a la velocidad actual, así como una tortuga, no logrará juntar ni 140 mil apoyos.
Es curioso que la fotografía de números ayer en estas páginas sea muy similar a los resultados de 2018, cuando López Obrador logró 53% de la votación y Ricardo Anaya 22%, treinta y un puntos de diferencia.
Digo que es curioso porque será muy poco probable que el siguiente año se repitan números como los vividos en el histórico 2018 que fue una paliza del lopezobradorismo al statu quo de la clase política… ¿Sheinbaum podrá repetir la hazaña?
Otro punto a considerar es el supuesto techo al que ha llegado la puntera, Claudia no crecerá más mientras que Xóchitl no caerá más, por lo que el margen puede cerrarse, pero ¿lo suficiente para siquiera rozar el empate con Sheinbaum?
En estos días la narrativa de la elección ha fastidiado a gran parte de la opinión pública. Para algunos el fenómeno que fue Xóchitl Gálvez ha perdido el impulso inicial del factor sorpresa y se siente estancado entre los ataques y la ausencia de apoyo de los partidos. En el caso de Claudia Sheinbaum no existió nunca ese factor sorpresa, hoy la candidata aburre con la evidente previsibilidad que arrastra.
Lo peor es que la cosa seguirá de flojera, al menos hasta marzo del próximo año, cuando ahora sí inicien las campañas electorales y las candidatas al fin puedan presentar propuestas y debatirlas, mientras tanto, creo que los números se mantendrán más o menos iguales.
De Colofón.-
Omar García Harfuch se perfila como el candidato de la izquierda en la Ciudad de México, aunque una buena parte de la izquierda lo rechaza por ser un perfil moderado y tener una carrera policial.
La oposición tiene un gran reto frente a sí contra Harfuch, se ha complicado aún más la posibilidad de ganar la capital.
Y todavía faltan ¡361 días! para que termine el sexenio.