Más allá de un rollo mareador sobre la ideología de cada candidata entre Claudia Sheinbaum y Xóchitl Gálvez, hoy quiero compartir con usted cinco puntos clave que veo en cada una de sus precampañas.
En el caso de Xóchitl Gálvez
1. Luego de tropiezos, confusiones y desconciertos, la estrategia empieza tomar forma clara: van contra el gobierno, afianzarán el voto anti lopezobradorista, que de por sí ya tienen en la bolsa. Apuestan al voto de castigo más allá del voto esperanzador.
2. Están enfocados en subir el conocimiento de la candidata que aún requiere de reflectores en varias partes del país, todavía mucha gente no sabe bien a bien quién es Xóchitl, pero el reto es mayor: deben conocerla y tener una opinión positiva de ella, cosa complicada de lograr cuando la ley prohíbe propuestas políticas en este periodo. El ser “Xingona” se les va quedando corto, es insuficiente.
3. Los números más alegres de la campaña son, al final, preocupantes, concediendo que la candidata va, en su mejor escenario, 15 puntos abajo del puntero. La remontada se mira cuesta arriba frente a un adversario con poder económico casi ilimitado, estructura y disciplina.
4. La narrativa de la precampaña no ha sabido contrarrestar la narrativa de una elección ya cantada, casi de trámite. Ni la candidata, ni la alianza convencen a los grandes poderes económicos del país de una posibilidad real de triunfo, los que serían sus aliados naturales los ven como una apuesta perdida.
5. Xóchitl Gálvez es una gran inspiración de la cultura del esfuerzo: ahí deberían de concentrarse los mensajes. Es ahí, en el aspiracionismo donde radica el gran mercado electoral que va a terminar por definir la elección y que no necesariamente está polarizado hacia el espectro anti 4T.
En el caso de Claudia Sheinbaum
1. El principal riesgo de la 4T no es la oposición sino la misma 4T que ha salido apenas libre de los pleitos internos entre los radicales y los moderados. El acto de indisciplina en la Ciudad de México que dio una victoria pírrica a los primeros aún cobra resentimientos que se traducen en patadas bajo la mesa que en algún momento podrían afectar a la candidata.
2. La estrategia de campaña de Sheinbaum se traza muy clara: buscan afianzar el voto pro gobierno que hoy goza de cómoda mayoría. Aquí viene un punto importante que marca diferencia con Gálvez: en la 4T no están buscando convencer a nadie, saben del tamaño de su aceptación.
3. En el escenario de hoy, Sheinbaum ha llegado a su techo, el crecimiento, si se da, sería minúsculo. De ahí que arriesguen muy poco; no se desmarcará de López Obrador porque no hay nada de qué desmarcarse. Es el mismo proyecto que cantan con orgullo, sin pena alguna: quien no crea en la transformación, no merece ser convertido. La campaña es un acto de fe mucho más que de proselitismo.
4. A diferencia de López Obrador, Sheinbaum está tejiendo muy fino, enlaces, reuniones clave y acuerdos aun secretos con poderes de primer nivel. No la veremos hablar de tigres salvajes en la Convención Bancaria del próximo año, ni con arrebatos bravucones a la menor provocación. En el reflector, para el pueblo bueno, puede ser la copia calca del más ácido López Obrador, pero en corto, entre fifís e intelectuales, se vende una izquierda moderna del siglo XXI.
5. Claudia Sheinbaum no ha logrado quitarse el perfil gris, no importa que Regina Orozco le dé clases en su podcast o que de pronto tenga un par de TikToks que se viralicen cuando habla de cambio climático. Si bien los números hoy le favorecen, la brecha terminará cerrándose para el siguiente año y muy poco del éxito actual le corresponde a la doctora. Una cosa es que esto se sienta hoy por hoy como una elección de trámite y otra que exista una garantía de cero sorpresas.
Pilón, en el caso de MC
1. Si el candidato es Dante Delgado tendremos al candidato más viejo en el partido que se vende como más joven. Si el candidato es Jorge Álvarez Máynez tendremos a un candidato joven que puede percibirse como tradicional y viejo… Como sea, tendrán suerte si juntan más del 7%.
De Colofón.-
23 militares viajarán a Panamá para desenterrar y traer a México los restos de Catarino Erasmo Garza, un opositor a Porfirio Díaz que López Obrador admira.
Los militares van apoyando a expertos de la Comisión Nacional de Búsqueda… Quizá nuestros desaparecidos en la guerra del narco actual tengan suerte de aquí a unos cien años.
Ya falta menos de un año… pero todavía faltan 291 días para que se acabe el sexenio.
@LuisCardenasMX