Por primera vez fuera del continente europeo se hace la exposición CoBrA que es el acrónimo de las palabras francesas COpenhague, BRuxelles y Amsterdam, a la vez que el nombre hace la referencia a la serpiente venenosa.
El 8 de noviembre de 1948 en el Café de Notre Dame en París, un grupo de artistas plásticos y poetas fundan L’Internationale des Artistes Expérimentaux (Internacional de Artistas Experimentales) después de haber firmado el manifiesto escrito por Christian Dotremont que lleva como título “La cause était entendue” (La causa está decidida) y es lo que ellos llaman la determinación para rechazar “abstracciones estériles” de arte geométrico como la obra de Piet Mondrian, denunciando a las ideas surrealistas de André Breton, todo esto organizado y lidereado por el danés Asger Jorn.
El grupo se forma después de haber estado aislados cada uno en su país por la invasión nazi durante la Segunda Guerra Mundial, e impactados por el trauma de los horrores vividos y unidos por la fortuna de haber sobrevivido con el deseo grande de alcanzar un renacimiento artístico para llegar a una autorrealización y empezar nuevamente como niños, según explica Karel Appel quien es parte de este grupo.
El movimiento dice que el genio creador no tiene cabida y apuesta por el desarrollo de un arte no especializado y no individualista. Es a través de este sentido de libertad que llevan a cabo un llamado a la revolución desde el arte de contraponerse a las reglas académicas y a los mandatos conservadores de la burguesía. Su primera exposición colectiva fue en 1949 en el Stedelijk Museum en Ámsterdam y fue duramente criticada por los especialistas de la época. Ya para el año de 1951 el grupo CoBrA se dispersa por políticas internas de sus militantes.
Después de leer todo lo anterior no creo que a alguien le queden muchas ganas de ver una exposición que suene así de complicada, sin embargo, les puedo decir que es una exposición en el Museo de Arte Moderno de la Ciudad de México (MAM) de lo más amable, divertida, colorida y muy fácil de visitar.
La muestra acaba de ser inaugurada el 8 de noviembre (mismo día que se leyó el manifiesto en París en 1948) y es una colaboración del Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura, el MAM y el Cobra Museum of Modern Art de Amstelveen (Holanda); va a estar abierta hasta el 12 de abril del 2020. Consta de 126 obras que provienen del MoMA, del Museo Rufino Tamayo, del MAM y de varios coleccionistas privados. En la exhibición hay escultura, pintura, fotografía, documentos, revistas, videos documentando el movimiento de Posguerra y su influencia para el arte contemporáneo.
Los artistas son de origen holandés, danés, francés y belga. Haciendo un poco de investigación en cuanto a cómo está el mercado de obras de este movimiento, encuentro primero que el mercado está en Holanda, Bélgica y Dinamarca, no sale obra a subasta muy seguido, los precios han ido subiendo y alcanzan para algunos de los artistas rangos de 300,000 a 400,000 euros, hay algunos de los artistas que pertenecieron al grupo que nunca han salido a subasta por lo que no hay referencia de precio. Las obras que mejor precio alcanzan se realizaron durante los tres años que duró el movimiento (1948-1951), sobre todo para los puristas y obras firmadas hasta por cuatro artistas del movimiento que son bastante raras, la subastadora que más maneja estas piezas es Bruun Rasmussen en Dinamarca.
No se pierdan esta muestra, les va a gustar.