Esta es la semana más líquida del sexenio. El presidente vive sus últimos momentos antes de que aparezcan los candidatos que le disputen el escenario público. Con dos aspirantes formalizados el 3 y el 6 de septiembre se generarán nuevos incentivos y comportamientos. AMLO aprovechará toda su capacidad publicitaria, ahora reforzada por el Informe del viernes, para vender la imagen de un país cada vez más parecido a “Fantasilandia” (Ebrard dixit).
El final de sexenio se siente en la impaciencia, cada vez menos contenida, del presidente. En la desmesura (“la p… plenitud del poder”) se imagina farmacias que opacarían a la fábrica de juguetes de Santa Claus. Se lanza sin reparo contra ministros de la SCJN, lastimando la división de poderes y conculcando el derecho de cualquier gobernado a litigar en tribunales lo que a su interés convenga. Se percibe la impotencia con manotazos, como el pretender que los siervos de la nación hagan el censo de los desaparecidos. El planteamiento es delirante. Trasladar esa función de una dependencia gubernamental con una mínima autonomía política (como la que tenía Quintana) al ejército de los leales, denota desesperación y no atiende el fondo del problema que enfrentamos como país. Sólo falta que nos acaben diciendo que los desaparecidos son seguidores de la 4T y además apoyan a Claudia.
En esta semana veremos las posturas definitivas del partido oficial. El oficialismo oscila entre creerse su propia propaganda y las denuncias del excanciller. En los medios se ven encuestas de todo tipo: vi una en la que se registraba ¡un empate técnico entre Claudia y Adán! y otra en la que de plano el tabasqueño ganaba. Se vale soñar. Marcelo ha reiterado que él tiene las suyas y que en todas gana. Claudia insiste en que al final, a pesar de las graves acusaciones que pesan sobre su candidatura y la sombra de duda que se proyecta sobre los sondeos, todo va a ir muy bien. En realidad, esta semana puede ocurrir cualquier cosa en el partido oficial. Una vez resuelta la incógnita mayor, vendrá el reacomodo de fichas para disputarse el Congreso y la estructura territorial.
En el Frente también tenemos una situación líquida aunque más espesa. Xóchitl sigue mejorando su postura relativa en las encuestas y Beatriz Paredes ha crecido en imagen. Es muy probable que el PRI utilice la consulta para exhibir su fuerza organizativa y negociar en mejores condiciones con Gálvez y el PAN. El proceso interno ha sido de mejor calidad que el de Morena y mejor arbitrado, su punto más débil estriba en que están confeccionando el traje del arlequín como proyecto político con el reparto de carteras antes de ganar. Hay encargos ministeriales que le restan credibilidad y viabilidad política a una propuesta de renovación.
Finalmente está MC, empeñado en negar lo que es una realidad y es que un sector amplio de ese partido tiene simpatías por Xóchitl y considera que es el momento adecuado para generar impulso y romper, en definitiva, la narrativa instalada hace tan solo a un mes de que la sucesión del 2024 era un paseo en barca para Morena. Dante podrá a finales de la semana tener más claridad sobre las consecuencias de la escisión del grupo Jalisco y la posibilidad de que Marcelo decida dar el paso fuera de Morena.
En suma, en “Fantasilandia” esta semana es la más líquida que recuerde y por lo tanto a los que les guste la política les espera un banquete similar al de las semifinales en una Copa del Mundo.