La Procuraduría que hemos heredado es incapaz de cumplir con las tareas mínimas de investigar los delitos de manera confiable bajo parámetros de legalidad. Aún los delitos más graves son investigados bajo métodos ineficaces y obsoletos. Esta es una debilidad institucional, no tiene que ver con la buena o mala voluntad de los funcionarios que trabajan y han trabajado en la Procuraduría; en realidad tiene que ver con la desatención histórica a procesos de gestión.
La semana pasada los miembros de la Comisión Técnica para la Transición de la Procuraduría General de Justicia a la Fiscalía General de la Ciudad de México, presentamos nuestras recomendaciones al Congreso local. Estas pueden consultarse en imdhd.org/fiscalia-general-de-justicia-cdmx . Entre las propuestas está diferenciar los procesos de investigación atendiendo al tipo de fenómeno criminal. Menciono algunos ejemplos:
Delitos de alta complejidad
Homicidio, secuestro, violación y desapariciones son delitos que requieren investigación científica de forma inmediata. La Comisión propone que, en estos delitos, el personal de la Fiscalía sea quien se transporte a las escenas criminales y abrevie los procesos de denuncia y recolección de evidencia crítica. Este tipo de violencia requiere grupos de investigadores especializados que además, puedan identificar patrones y contextos comunes entre casos. La dinámica de trabajo que existe hoy entre fiscales, peritos y policías tiene que revisarse ya que el método de trabajo actual burocratiza la investigación y la torna ineficaz.
Violencia familiar
Esta es la que se denuncia con mayor frecuencia después del robo en todas sus modalidades. A diferencia de otros delitos, aquí el perpetrador es conocido y la institución tiene altas probabilidades de mejorar la situación de las víctimas. La Comisión propone crear unidades de atención de violencia familiar en Fiscalías regionales distribuidas en toda la Ciudad. Estas unidades proveerán una multiplicidad de servicios y estarán integradas con personal que sea capaz de generar respuestas diferenciadas en atención al contexto y nivel de riesgo de la víctima.
Delitos de incidencia cotidiana
Los delitos como el robo en el transporte público generan un alto costo social por su frecuencia. Afectan de forma desproporcionada a poblaciones vulnerables quienes son, además, susceptibles de victimización múltiple: un mismo delito le ocurre una y otra vez a la misma persona. Hasta ahora, la procuraduría capitalina recibe estas denuncias pero es incapaz de investigarlas. La Comisión técnica propone crear una Unidad de análisis criminal que analice este tipo de fenómenos en su conjunto y logre identificar al puñado de personas que son responsables de cientos de delitos.
Siguientes pasos
Los miembros de la Comisión estimamos que se requiere refundar nuestra institución de procuración de justicia. Si nos abocamos a esta tarea, los primeros resultados podrían verse en dos años y consolidarse en cuatro.
La ciudadanía tal vez quisiera que el cambio fuera automático. Si comparamos el sistema que tenemos con una obra de teatro, en este momento no se trata de cambiar a los actores, hay que reescribir la obra entera. Si el Congreso local decide invertir los recursos presupuestales para esta misión y si la voluntad política de fortalecer la investigación criminal subiste, podemos aspirar a mejorar el problema de la impunidad en la Ciudad de México.
Miembro de la Comisión técnica para la transición
de la PGJ a la Fiscalía General de Justicia
de la CDMX