Hace unos días, el Inegi publicó los resultados de su segunda Encuesta Nacional de Adolescentes en el Sistema de Justicia Penal (Enasjup 2022). Una revisión inicial de los datos apunta hacia algunas fortalezas importantes de este sistema que fue creado enteramente en 2016.
Defensores de oficio con desempeño satisfactorio.
El primer dato sorprendente y alentador es la evaluación que tienen los adolescentes sobre el desempeño de los defensores de oficio. Más de dos terceras partes, el 83.9% de los encuestados que tienen un proceso en curso, afirmaron estar satisfechos con el desempeño de los abogados pagados por el Estado. Más sorprendente aún es que esta evaluación positiva se mantiene en aquellos adolescentes (78.5%) que fueron sancionados tras concluir su proceso.
En México, por mucho tiempo, ser representado por un defensor de oficio significaba jugarse el destino en contra. Los resultados de la encuesta nos permiten reconsiderar ese pronóstico. Son buenas noticias.
Jueces percibidos justos.
Además de los resultados sobre la defensa pública, el segundo hallazgo claramente alentador es que los adolescentes valoran el desempeño de los jueces. Por ejemplo, 70% de los declarados culpables tendieron a evaluar su sentencia como justa y 74% reportaron sentirse escuchados por el juez. Este resultado implica, que a pesar de recibir una sentencia desfavorable, los jóvenes pueden calificar positivamente a los jueces. Estos indicadores son inusitados en el sistema penal mexicano.
No todo son buenas noticias. La Enasjup 2022 también revela las áreas oscuras del sistema.
Maltrato y tortura.
Uno de los aspectos más preocupantes se relaciona con el maltrato y tortura a la que son sujetos los adolescentes que transitan por el sistema penal. Por ejemplo, las detenciones son un momento de enorme vulnerabilidad. Las autoridades cometen al menos un tipo de crimen en la mitad de todas las detenciones de adolescentes hombres y en una de cada tres detenciones de adolescentes mujeres. La agresión más frecuente consiste en golpes y patadas, además del robo de pertenencias. Para quienes son mujeres se agrega el riesgo a ser víctimas de violencia sexual; las adolescentes reportaron acoso sexual, manoseo, exhibicionismo o intento de violación en una proporción cuarenta veces mayor que los hombres.
Por otro lado, la violencia perpetrada por autoridades en las Agencias del Ministerio Público es muy grave; 19% de los adolescentes padecieron violencia en estas instalaciones. En la mayoría de los casos, las agresiones son compatibles con una definición legal de tortura, como provocar la asfixia de múltiples formas o usar descargas eléctricas en contra de los detenidos. Esto es inaceptable.
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La única forma imparcial de evaluar el sistema de justicia es con esfuerzos sistemáticos de recolección de datos como los que hace el Inegi sobre el sistema penal. La Enasjup 2022 muestra aquello que debe atenderse de inmediato, pero muestra también que se pueden crear espacios donde la mejora institucional es posible.
Investigadora en justicia penal.
@LaydaNegrete
