En Zacatecas nos cuentan que Cristian Camacho Osnaya ha quedado a deber, a un mes de que se convirtió en el nuevo fiscal estatal, lo que creó muchas expectativas. Nos señalan que en su plan de trabajo prometía un mayor acercamiento con la gente y una mejor estrategia de comunicación social, pero recientemente ha preferido “hacer mutis”, como en el caso de un presunto robo millonario a un camión de valores, el cual ni confirmó ni desmintió, y el que sale al quite es Rodrigo Reyes Mugüerza (Morena), secretario general del gobierno estatal, quien se ha convertido en “el apagafuegos” de todos los problemas del Ejecutivo local y, ahora, del fiscal. ¡Qué tal!
MC inicia con el pie izquierdo
Desde Puebla, nos comparten que todos se encuentran listos para el inicio de las precampañas y en los “cuartos de guerra” de los tres virtuales candidatos a la gubernatura se reportan listos para salir a ganarse el voto y hacer grandes promesas. Sin embargo, nos detallan que, mientras el abanderado morenista Alejandro Armenta Mier y el aspirante del frente opositor, el panista Eduardo Rivera Pérez, “afilan sus armas”, el precandidato de Movimiento Ciudadano, Fernando Morales Martínez, “comenzó con el pie izquierdo”, pues en un afán de ganarse a los medios realizó acciones que se percibieron como intentos de “maicear” a reporteros, lo cual no fue bien visto. ¡Zas!
Los invitados incómodos en Yucatán
Los que aplicaron la de “más vale prevenir, que lamentar” en Yucatán, nos comparten, fueron los morenistas, en el evento de la precandidata a la Presidencia Claudia Sheinbaum Pardo (Morena) en Kanasín. Nos relatan que en el acto estuvieron presentes las nuevas adquisiciones de la 4T: el diputado federal Rommel Pacheco (Morena) y los senadores Jorge Carlos Ramírez Marín (PVEM) y Verónica Camino Farjat (Morena), pero ninguno de los tres estuvo cerca del presídium ni tampoco se les presentó para evitar un abucheo, pues los morenistas de cepa aún no los aceptan y los han criticado por el cambio de bandera, por lo que “nadie los vio y nadie los escuchó”, mucho menos doña Claudia.