A quien “le hicieron el feo” en Guanajuato, nos cuentan, fue a la exalcaldesa de León y expriista Bárbara Botello Santibáñez, en su nuevo partido Morena, pues sus “compañeritos” la dejaron fuera de los designados para la encuesta final del candidato o candidata a la gubernatura. Nos indican que varios no lo podían creer, pues en los últimos meses, doña Bárbara “se la había rifado” interponiendo denuncias de presuntos actos de corrupción contra los gobiernos panistas, pero el colmo fue que en el listado se incluyó de último momento al empresario Héctor Tejada, presidente de la Concanaco-Servytur. ¿Habrá mano negra contra doña Bárbara?
Apuntan gastos de los “suspirantes”
En Sinaloa, nos platican que la dirigente estatal de Morena, Meraly Villegas Sánchez, parece que “predica en el desierto”, pues a pesar de los constantes llamados que hace a calmar la calentura electoral, siguen brotando los pronunciamientos de aspirantes a una candidatura por alcaldías y diputaciones. Sin embargo, nos indican que, ante el dispendio de recursos que se observa en municipios como Mazatlán donde hay una larga fila de suspirantes, doña Meraly “sacó el colmillo” y está llevando la cuenta de dichos gastos para conocer el origen de esos financiamientos y al momento de la definición ponerlo en la balanza para ver en verdad “de qué cuero salen más correas”. ¡Ajúa!
Minimiza protesta de médicos
La que no se ayuda mucho en Baja California Sur, nos comentan, es la delegada de Bienestar, Yanssen Weichselbaum Calderón (Morena), quien quiere una curul o un escaño en 2024, pero empezó con el pie izquierdo. Nos relatan que, ante la protesta de personal de salud en Palacio de Gobierno que reclama basificación en la transición IMSS-Bienestar, doña Yanssen opinó que sólo son “retrasos burocráticos” y que no eran más de 20 personas las inconformes, lo que enfureció a personal médico y enfermeras, quienes respondieron que son al menos 300 y si no salen a protestar no los escuchan, además de que le echaron en cara que si así los va a representar, mejor no quieren nada. ¡Zas!