Desde Hidalgo, nos platican que en el municipio de Tulancingo “se sirven con la cuchara pozolera”, pues la alcaldesa Lorena García Cázares (Morena) y varios de sus funcionarios metieron a varios familiares a la nómina. Nos detallan que doña Lorena tiene “trabajando” a sus hermanas, sobrinas, su nuera y su esposo; pero como “lo que hace la mano, lo hace el de atrás”, también el secretario general municipal, Luis Edmundo Aguilar; el secretario de Tesorería, José María Guevara, el director de Museos, el secretario de Obras Públicas y el director Jurídico, colocaron a su parentela, aunque al llegar a oídos del gobernador Julio Menchaca (Morena) pidió que se iniciara una investigación. ¡Qué encaje!
Víctor Castro “echa mano” de panista
“A la de sin susto”, nos cuentan que el gobernador de Baja California Sur, Víctor Castro Cosío (Morena) anunció en sus redes sociales la salida de la doctora Zazil Flores Aldape como secretaria de Salud, sin un “gracias”, y en su lugar quedó la doctora Ana Luisa Guluarte Castro. Nos explican que doña Ana Luisa es reconocida por los trabajadores “por conocer al dedillo” la institución y el oficio político, por lo que en los pasillos se comenta que don Víctor buscó un perfil con “más colmillo” para que aterrice el IMSS-Bienestar, y para ello se tuvo que “tragar sus palabras” ya que la doctora perteneció a la administración panista que tanto criticó y ahora podría ser “su salvadora”. ¡Auch!
Lideresa del PAN, con todo en contra
La que irá “cuesta arriba” en Sinaloa, nos comparten, es la lideresa electa del PAN, Wendy Liliana Barajas Cortés, pues a pesar de haber ganado la dirigencia su reto será mantener la unidad, ya que el partido “se desmorona como mazapán” y más con el pasado proceso interno en el que su rival, Vanesa Sánchez Vizcarra, acusa que “no le jugaron limpio” y “se cargaron los dados en su contra”. Nos indican que parte de su tarea de doña Wendy será limar asperezas y dejar los rencores de lado y para ello tendrá que ceder espacios a los inconformes y diseñar una estrategia para ganar la calle con un discurso que convenza, pues en la elección interna sobró la apatía. ¡Zas!