Donde todo iba bien hasta que tuvieron que hacer cuentas, nos comentan, fue en el municipio de Puebla, pues hubo un encontronazo entre el alcalde en funciones de la capital, el panista Adán Domínguez Sánchez, y el electo, el morenista José Chedraui Budib. Nos indican que el asunto detonó por un supuesto desorden administrativo y una presunta solicitud que hizo don Adán para endeudar al ayuntamiento a unos cuantos días de la conclusión de la actual administración, por lo que entre tanta especulación don José prefirió dejar en claro que revisará “con lupa” el uso de los recursos y que irá hasta sus últimas consecuencias en caso de que encuentre alguna irregularidad; “sobre aviso no hay engaño”. ¡Auch!
Olvida diputada de Chihuahua “pecadillos del pasado”
A la que le metieron gol en el Congreso de Chihuahua, nos cuentan, es a la diputada local de Morena, Brenda Ríos Prieto, quien llegó “muy filosa” a reclamar la existencia de un supuesto Cártel Inmobiliario en el estado. Sin embargo, nos relatan que en respuesta la bancada panista le reprochó que hace 10 años fue señalada por entregar o vender pozos de agua cuando su esposo, Alex LeBarón González (PRI), era titular de la Conagua, por lo que sus compañeros de bancada tuvieron que entrarle al quite y exigieron que si sus detractores tienen pruebas en su contra, que las presenten, e insistieron en que ese hecho ocurrió hace más de 10 años, pero llamó la atención de varios que doña Brenda no se acordara que por ahí le podían “tirar a gol”. ¡Qué caray!
Queda Sahara Munira en la mira
La que tendrá la lupa en todo lo que haga en el Congreso de Chiapas, nos comentan, es la diputada Sahara Munira José Flores (Morena), cuñada de la senadora Sasil Dora Luz de León Villard (Morena), quien llegó a la curul haciéndose pasar por integrante de la comunidad LGBTTTIQ+. Nos indican que, por lo pronto, varios criticaron que a doña Sahara la designaran como titular de la Comisión de Seguimiento de las Acciones de Procuración de Justicia, vinculadas a los feminicidios, pues argumentan que si no tuvo el mínimo respeto por la comunidad de la diversidad sexual, mucho menos atenderá un problema tan fuerte que requiere de sensibilidad. ¡Ni cómo ayudarla!