Al que no se le está dando la buena comunicación en Guanajuato, nos cuentan, es al alcalde de Celaya, Juan Miguel Ramírez Sánchez (Morena). Nos relatan que hace unos días afirmó que por desconfianza en la Fiscalía General del Estado (y en especial en su titular Carlos Zamarripa Aguirre) será hasta 2025 cuando denuncie las presiones que recibió antes de tomar posesión por parte del crimen organizado para que les entregara varias direcciones del gabinete, pero no contento con eso, esta semana, al referirse a la masacre en Apaseo el Grande, señaló que “no es posible que los delincuentes lleguen y disparen así nada más (...) los mafiosos deben cuidar las formas”. ¿Querrá que haya un protocolo de saludo antes?
Reaparece Moreira “con filo”
Donde “hubo varias cejas levantadas”, nos comparten, fue en el primer informe del gobernador de Coahuila, Manolo Jiménez Salinas (PRI), pues entre los invitados estuvo el exmandatario Humberto Moreira Valdez (PRI), a quien hacía mucho tiempo no se le veía. Nos relatan que fue inevitable que don Humberto pasara desapercibido y más porque, fiel a su costumbre, buscó llamar la atención y lanzó fuego con sus palabras contra los exgobernadores priistas, Rubén Moreira Valdez (su hermano) y Miguel Riquelme Solís, quienes, dijo, nunca lo invitaron a sus informes y se alejaron de la gente. ¡Qué sentido, don Humberto!
Comienza edil “cuesta arriba”
El que confirmó que “no es lo mismo ver los toros desde la barrera, que en el ruedo” en Chiapas, nos comparten, es el alcalde de Tuxtla Gutiérrez, Ángel Carlos Torres Culebro (Morena), pues en campaña prometió que haría de la capital una ciudad segura y que hasta él mismo haría labores de vigilancia. Sin embargo, nos indican que “en el mundo real” van tres homicidios de menores de edad que han indignado a la población: uno el de una adolescente, quien había huido de la violencia en Frontera Comalapa y le tocó una bala perdida cuando viajaba en el transporte público; otro, el feminicidio de una niña en el barrio Colón y el más reciente, el de una joven estilista, presuntamente asesinada por su pareja sentimental. “A hablar menos y a chambearle más”.