La pandemia por el Covid-19 evidenció las deficiencias del sistema de salud pública en México. Desde el gobierno, se manejó de manera ideológica. Pensaron en la rentabilidad política y no en la vida de los mexicanos.
En nuestro país, a pesar de la experiencia de la primera ola de contagios, no se replanteó la estrategia por parte de las autoridades, quienes únicamente se limitaron a repetir los errores cometidos y se puso en riesgo a millones de mexicanos que se contagiaron de esta enfermedad.
Por ello, se hace necesario leer el texto de la Doctora Laurie Ann Ximénez-Fyvie, “Las vidas que no contaron”. Un texto que aborda y presenta desde un punto de vista científico y humano la gran tragedia que ha representado para nuestro país la pandemia provocada por el SARS-CoV2. Esta obra analiza de manera objetiva y crítica, las decisiones y la tardía implementación de políticas públicas por parte de las autoridades competentes.
La pandemia registró oficialmente el primer caso positivo en nuestro país en febrero de 2020, sin embargo, éste sería el primero de los más de 6 millones que se han reconocido por el gobierno mexicano. A ese dato, habría que sumarle la cifra negra, la cual parece, no tener fin.
Como se expone en esta obra, la pérdida de vidas humanas es un daño irreparable, se truncan sueños y aspiraciones, dejan un vacío en sus círculos cercanos y, como sociedad, nos trastoca. La frase de la Doctora Ximénez-Fyvie “cada vida perdida es un pequeño universo que se quiebra”, es avasalladora.
El gobierno federal hizo oídos sordos de cientos de especialistas, quienes advirtieron que las políticas de prevención que se estaban implementando, no funcionaban y resultarían, a corto y mediano plazo, insuficientes. Mientras en otras naciones se implementaban medidas serias y tajantes de contención y prevención, en México se decidió por minimizar los efectos de esta enfermedad.
Como lo ha referido la doctora Laurie Ann, “somos el país número uno en mayor número de muertes en los profesionales de la salud, esta es seguramente una de las cifras más vergonzosas y lamentables que podemos tener”. Estuvieron en la primera línea y no se les protegió.
El ministro en retiro José Ramón Cossío Díaz ha destacado que este texto sirve como evidencia de lo que se hizo mal durante esta pandemia. Refiere que “es un libro con una base teórica e informativa importante. No hay un ocultamiento de la verdad y tiene algo muy apreciable que es la posibilidad de contrastar las afirmaciones y las fuentes”.
Igualmente, el exsecretario de Salud y hoy diputado federal, Salomón Chertorivsky, ha señalado que “este libro es un ejercicio de rendición de cuentas”. Y destacó que, a lo largo de esta pandemia, hubo un problema moral, radicado “en la irrelevancia en las vidas o las personas que perdieron la vida por una condición estrictamente política”.
Sin duda, “Las vidas que no contaron” es un libro que visibiliza las malas decisiones del gobierno federal y el sentir de las familias mexicanas que perdieron a un ser querido. Consagra las experiencias de quienes hicieron frente a esta pandemia en una lamentable desventaja con el mundo. Nos tocó el peor gobierno en el peor momento.
Senadora
Suscríbete aquí para recibir directo en tu correo nuestras newsletters sobre noticias del día, opinión, planes para el fin de semana, Qatar 2022 y muchas opciones más.
