El día de hoy, 20 de octubre, se celebra el tercer Día Mundial de la Estadística (DME). Su primera edición tuvo lugar en el 2010 y la segunda en 2015. Por lo que, en esta tercera edición vale la pena hacer una breve reflexión del por qué celebramos este día.
Las estadísticas oficiales son trascendentales para el desarrollo económico y social de países y comunidades puesto que son indispensables para el diseño y evaluación de políticas públicas. Son también necesarias para la investigación científica y para el crecimiento de empresas y sociedad civil, influyendo en las decisiones de todos los sectores de la sociedad. Se elaboran en apego a estrictos estándares de calidad, con base en metodologías científicamente sustentadas, por instituciones técnicas que cuentan con profesionales de la más alta preparación.
En 2010 la Asamblea General de la ONU (AG-ONU) decidió reconocer la importancia de que existiera la capacidad estadística necesaria para producir indicadores fiables y oportunos, que fueran la base para tomar decisiones informadas. Así, designó el 20 de octubre como el primer DME (RES 64/247) con el tema “Celebración de los numerosos logros de las estadísticas oficiales” y los valores básicos de servicio, integridad y profesionalidad.
En los siguientes años, el ecosistema de datos creció de manera exponencial con información de distintas fuentes. En respuesta a esta nueva dinámica, el Secretario General de la ONU encargó un reporte sobre la “Revolución de datos para el desarrollo sostenible”, publicado en noviembre de 2014. Este reporte antecedió la adopción de la Agenda 2030 y sus Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) en 2015. A pesar del enorme crecimiento de la oferta de datos, el monitoreo de los 17 ODS y sus 247 indicadores resultaron ser un gran desafío incluso para los países más desarrollados, por lo que se requería fortalecer las capacidades estadísticas mundiales, aprovechar el potencial de la nueva tecnología y explotar las nuevas fuentes de información, haciendo énfasis en información estadística de calidad. En este contexto, la AG-ONU designó el tema del segundo DME como “Mejores datos. Mejores vidas” y decidió institucionalizar su celebración cada 5 años (RES 69/282).
Y así, en este año 2020, llegamos a la tercera edición de esta celebración. Estamos en una coyuntura en la cual las necesidades de información crecen aceleradamente en su profundidad y complejidad, ejemplificadas de manera precisa por la demanda de datos que permitan medir el impacto de la pandemia que estamos viviendo. El tema en 2020 es “Conectando al Mundo con Datos Confiables”. Este DME resalta como el mundo cambia todos los días a una velocidad vertiginosa y el ecosistema de datos también evoluciona. Mientras esto sucede, los países están cada vez están más conectados, ya sea por vínculos económicos o sociales, por lo que la información estadística confiable resulta indispensable para conocer los fenómenos que acontecen, comprender nuestro mundo y fundamentar la toma decisiones basadas en evidencia.
En este Día Mundial de la Estadística celebramos la confianza de la sociedad en la información que instituciones como el Inegi generan todos los días y de cómo estos datos fiables contribuyen directamente, todos los días, al progreso de nuestras sociedades.
Presidente del INEGI
