En la mira está la y el excelente trabajo que hacen en las selecciones menores de futbol, desde aquel 2005 con el Campeonato Mundial Sub-17 hasta la medalla de bronce conseguida en Tokio por el combinado nacional Sub-23 .

¿Son potencia mundial? Estoy convencido de que sí; no es obra de la casualidad tener tan buenos resultados en este tipo de categorías con límite de edad. Sin embargo, para que esto suceda se debe invertir mucho dinero, mandar a los seleccionados y entrenadores a giras por Europa, Asia, Sudamérica y otras partes del mundo, es un proyecto que cuesta, pero que por fortuna da resultados, incluso las seleccionadas nacionales ya comenzaron desde hace algunos años a recibir el mismo tipo de beneficios, salir de Concacaf para enfrentarse a los mejores equipos del mundo.

La medalla de bronce conseguida en Tokio reafirma esta teoría, en esta ocasión Jaime Lozano conformó un grupo de jóvenes talentosos, reforzados por tres jugadores de categoría que apuntalaron al equipo; la gran ventaja del entrenador en esta ocasión es que la mayoría son jugadores titulares en la Liga MX , algunos llevan desde los 15 años en las diferentes categorías de las selecciones nacionales, tienen más de 100 partidos internacionales, están acostumbrados a enfrentarse a grandes potencias. Pero ahora viene la pregunta del millón ¿Por qué se gana en Sub-17 campeonatos mundiales, en la Sub-20 se han conseguidos buenos resultados como el tercer lugar de Colombia , dos medallas olímpicas, una de oro en Londres y el bronce de Tokio y en la mayor no se logra trascender?

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En primera instancia me parece que los federativos y entrenadores de la Selección mayor no saben poner un alto a las famosas vacas sagradas, no es posible que una final de Copa Oro contra el equipo B de Estados Unidos se pierda, que el equipo tenga una media de edad de 32 años, el equipo mayor de la Femexfut es añejo, imagínese que a Qatar llegarán jugadores de más de 35 años, simplemente a retirarse.

Tal parece que, en la Selección mayor , la que más dinero deja, no existen proyectos como en las menores, me queda claro que no hay planeación, siguen pensando que Guardado, Moreno, Araujo, Herrera, Ochoa, Talavera entre otros nos van a llevar al quinto partido sólo por su jerarquía. Si Martino no combina la Sub-23 con la mayor el resultado será el mismo en 2022 , necesita hacer un cambio generacional. Lo mejor es que el Tata se encargue del próximo Mundial y se le den las gracias, entregar el proyecto a un técnico nacional que entienda que en 2026 México no puede fallar y debe llevar a su mejor equipo para buscar estar dentro de los primeros cuatro del mundo.

Las selecciones menores son potencia, enfrentar a México no es sencillo, ojalá pronto alguien entienda que este mismo modelo se debe replicar en la mayor y darles salida a los cabecillas, para conformar una nueva generación.

@JC_Zuniga

 
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