Quiero dedicar este artículo a Ciro Gómez Leyva, a todas y todos los periodistas asesinados, a las y a los que han sido perseguidos, amenazados, y a las y los que diariamente arriesgan su vida para informarnos.

Debe parar el golpe de Estado a la democracia, y deben parar también los ataques y señalamientos que en cada mañanera se hacen a las y los periodistas, y medios de comunicación, que ejerciendo su libertad de expresión no coinciden con el gobierno actual.

Entre enero y noviembre de 2022 han sido asesinados 17 periodistas, José Luis Gamboa Arenas, Margarito Esquivel Martínez, Lourdes Maldonado, Roberto Toledo, Yessenia Mollinedo, Sheila Johana Garcia Oliveira, Yessenia Mollinedo Antonio de la Cruz, Ernesto Méndez, Fredid Román, por mencionar algunos.

La organización Artículo 19 ha contabilizado mil 945 ataques a la prensa por parte del presidente Andrés Manuel López Obrador, así como 30 asesinatos a periodistas y dos desapariciones. De diciembre de 2018 a 2021, los ataques a periodistas por parte de la Presidencia aumentaron 85 por ciento.

Desde el púlpito mañanero se ha descalificado, atacado y señalado en reiteradas ocasiones, entre otros, a Ciro Gómez Leyva, Carlos Loret de Mola, Carmen Aristegui, Víctor Trujillo, Sergio Sarmiento, Joaquín López Dóriga, Azucena Uresti, Denise Dresser.

El presidente ha expresado que las denuncias de violencia contra periodistas y comunicadores no son para "rasgarse las vestiduras".

Organizaciones defensoras de la libertad de expresión han advertido que el hecho de que la descalificación y la estigmatización contra la prensa venga desde un jefe de Estado a través de una tribuna nacional, "es un discurso muy peligroso para todo el gremio periodístico de México", sobre todo al estar en un país donde en tan sólo un mes se han asesinado a cinco periodistas.

“Cuando las autoridades les dan la espalda a los periodistas y los señalan como el enemigo, también lo hace la sociedad. Es importante entender la situación de vulnerabilidad de los periodistas, están bajo muchísimo riesgo por la misma campaña de estigmatización, y la actitud hostil del Estado, lo que genera autocensura”, señaló Artículo 19.

Un golpe de Estado a nuestra democracia

Este gobierno y su mayoría legislativa han dado un golpe de Estado a nuestra democracia y a nuestra Constitución.

La reforma electoral aprobada por el oficialismo está plagada de vicios desde su origen; atenta contra la autonomía del INE, lo asfixia presupuestalmente, lo debilita en su estructura, pone en riesgo su capacidad operativa, al padrón electoral, y de paso, la credencial de elector.

Lo más paradójico es que están destruyendo al INE que reconoció los votos y la legitimidad de la elección del 2018, ese INE que ha reconocido la legitimidad de 22 gobernadores del partido mayoritario y sus aliados en los últimos años.

El INE como toda institución es perfectible, pero no se cambia destruyendo, no se cambia sacando el hacha, se cambia dialogando, construyendo acuerdos, haciendo política, escuchándonos.

Tal como lo dije desde la tribuna del Senado, esta lucha no concluye aquí, porque iremos a la Suprema Corte a defender la democracia.

Convocamos y pedimos a la Corte que cumpla con su responsabilidad de lealtad a la Constitución, que es a la única que debe jurar lealtad.

Me permito citar a John Stott cuando afirmó: “La esencia de la democracia es descentralizar el poder, descentralizar el poder es proteger a los gobernantes contra su propia locura”.

Defendamos a México contra cualquier locura. Defendamos a México de las tentaciones autoritarias y centralistas.

Este golpe de Estado debe pararse, porque sin democracia y sin libertad, todas y todos perdemos. No importa el partido del que seamos, no importa el lugar donde vivamos, no importa el origen que tenemos, no importa la religión que profesemos, sin libertad no vale la pena vivir.

 
Senadora de la República 

Google News

TEMAS RELACIONADOS