En 1857, siendo presidente de la Suprema Corte de Justicia, Benito Juárez impidió que el entonces presidente Ignacio Comonfort, desapareciera la Constitución para establecer una nueva acorde a sus ideales, pensamientos e interese personales.
Juárez sabía que gobernar desconociendo la Constitución era un suicidio político, y por ello enfrentó a Comonfort.
La historia señala que, si bien Juárez coincidía con Comonfort en que la Constitución era perfectible, eso no suponía que debía de ser ignorada, y muchos menos, reemplazada.
La negativa de Juárez de destruir por completo la Constitución no solo provocó que Comonfort lo llevara a prisión, sino también a levantarse en armas contra el gobierno de éste en defensa del orden constitucional.
El militar, escritor y político, Manuel Payno, narra en uno de sus escritos, ser testigo de un diálogo privado entre Ignacio Comonfort y Benito Juárez, en donde el primero dijo: "es necesario que cambiemos de política, y yo desearía que tú tomaras parte y me acompañaras", a lo que Juárez respondió: "te deseo buen éxito".
Hoy, 166 años después, y ante la frase "no me vengan con ese cuento de que la ley es la ley", Benito Juárez se opondría nuevamente al desconocimiento de la Constitución, y seguramente, se uniría a la defensa de ésta, tal y como lo hizo en 1857.
Juárez siendo presidente de la Suprema Corte defendió la Constitución, y le dijo "no" al presidente en turno cuando pretendió desaparecerla.
Actualmente las y los ministros de la Corte son vapuleados desde el púlpito mañanero un día sí y el otro también, su pecado, defender y hacer valer la Constitución, lo mismo que Juárez hizo ante Comonfort.
Juárez sería hoy considerado un "hipócrita" por defender la Constitución, tal y como lo expresó el inquilino de Palacio Nacional, cuando se refirió a la mayoría de las y los ministros que se han opuesto a sus reformas.
Ante las constantes violaciones a las leyes y a la Constitución por parte del actual régimen, hoy México necesita que seamos muchos los que defendamos nuestra Carta Magna, y no solo la mayoría de las y los ministros, que con su voto, han tenido el valor de hacerlo.
En estos tiempos en que el odio y la sin razón gobiernan, la unidad en torno a la Constitución es lo que le urge a México, no podemos ni debemos ser indiferentes ante los atropellos que desde el régimen se hacen.
La división de Poderes está establecida en nuestro orden constitucional, y se tiene que hacer valer. Ningún Poder está por encima del otro, y mucho menos, se pueden amedrentar entre sí, quien lo haga de esa forma, no puede decirse juarista.
Defendamos la Constitución y respaldemos a las y los ministros, que pese a las presiones, llamadas telefónicas y palomas mensajeras, han defendido nuestra Carta Magna.
Hoy tenemos una ministra presidenta que se ha mantenido leal a nuestra Constitución, y que frente a las pretensiones de atropello a ésta, ha respondido al Presidente, -"te deseo buen éxito"-, tal y como lo hizo Benito Juárez.
Senadora de la República