Mientras La Roma Records acaba de sacar el vinil de las Ultrasónicas, a 20 años de su lanzamiento original, con sus primeras grabaciones punk en fulgurante vinilo negro e inserto profesional, justo es que se sepa que es muy probable que Sony Music México saque pronto el primer y único LP del trío de Los Monjes, en el Politécnico.

Se tiene planeado que salga en vinilo color naranja.

En el disco vienen prácticamente todas las canciones del concierto en vivo, más siete bonus tracks del único extended play que grabaron y tres de una edición económica que hicieron en Discos Okeh.

El álbum está remasterizado y es muy superior a una edición balín en disco compacto que circula en el tianguis del Chopo, de la que no se sabe gran cosa, aparte de que “tiene cuatro bonus de canciones del mismo concierto”

Quien es un conocedor de discos, no se le hinca a cualquier CD, por mucho que sea el apantalle y la presentación.

Por eso muchos se dejan embaucar pagando precios estratosféricos por discos compactos y discos de vinil que no valen lo que se dice de ellos.

La gente no sólo busca lo prohibido o lo poco promocionado en su momento, sino las rarezas. Por eso, súbitamente, cuando aparece algo anómalo, hay quienes se dejan llevar por la pasión y el instinto, no midiendo las consecuencias, ni consultado lo ya existente en sitios de referencia como Mercado Libre o Discogs.

Muy pocos, que se sepa, tienen la colección Y se armó el rock, que originalmente fueron lanzados por la disquera Denver en una edición de nueve discos compactos con muchas curiosidades poco promocionadas en su momento (algo que era muy sintomático de aquella disquera), rifan ahora en 850 pesos todos.

Bátiz, que se dice en esa historia amañada del rock latinoamericano (Según Gustavo Santaolalla) que inventó el rock mexicano, la Banda Bostik, Heavy Metal, Liran Roll, Next, Leprosy, Espécimen, Trolebús, Rod Levario, Sam Sam, Isis, Heavy Nopal, vienen como una buena muestra de ese rock mexicano proscrito.

Otro ejemplo es el Dr. Fanatik, voz en el disco de la Suciedad de las sirvientas puercas (al que nadie le presta la atención debida), no cotiza lo que debería en sus compactos de marca Es mi Heroína, su homónimo y uno que grabó para Opción Sónica. Sin embargo, el doc es uno de los que mejor ha sabido aprovechar la plataforma de Spotify.

Así como estos innovadores del rock mexicano, hay pocas huellas qué seguir en caso de bandas muy sobrevaloraras como Los Odio, que algunos califican de “súper banda”, con sus ideas y sonidos presentes en Spotify. En ese mismo tenor y espacio sónico se encuentran Le Barón, con cinco discos, y Austin TV, con otro tanto de diversos discos que ni en la piratería están.

pepenavar60@gmail.com

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