Para los que en estas épocas de contingencia musical y regreso sin condiciones al pasado donde se inventó todo, y que están buscando sus deliciosos nuggets, aderezados con los sonidos: garageros, por la vanguardista, prepunk y proteínicamente psicodélicos, la orden de nuggets se despacha en cuatro álbumes, mini elepés o compilaciones en CD. Irónicamente debería ser la disquera Warner la que los sacara a la venta aquí, pero lamentablemente no es así.
Sin embargo, el sello internacional Rhino Entertaiment, que alguna vez fuera una etiqueta para reciclar el pasado psicodélico del catálogo de Warner, para no dejar desprotegidos en el mundo a los fanáticos de los sonidos iniciales con lo que empezó una revolución musical, tiene circulando en ediciones internacionales en varios mercados alternativos cuatro álbumes con 117 temas de los Originales Artyfacts con la primera ola de la era psicodélica (1965-1968).
Cuando los Beatles dominaban las listas de popularidad, seguidos de los Stones, mientras en Inglaterra se abría paso a punta de lamé, maquillajes y diamantina el glam, sin que se vislumbrara el punk, muchos grupos prácticamente desconocidos grababan otros sonidos. Gente que integraba combos como los Electric Prunes, Los Standells, The Barbarians, The 13th Floor Elevators, The Count Five, The Amboy Dukes (donde comenzó cantando Ted Nugent), The Crying Shames, The Nazz, The Magic Mushrooms, comenzaron a ser muy solicitados.
Una segunda oleada con The Beau Brummels, The Turtles, Love, The Outsiders, The Blues Magoos, The Human Beinz y otros, marcaba la línea de una nueva, pegajosa y desafiante música de rock, que no conocía entonces la etiqueta de alternativa. A ellos vendrían luego a sumarse Sir Douglas Quintet, The Shadows of Knight, The Music Machine y The Sonics.
En una época marcada por la audacia de muchas bandas que no tenían nada que perder y que ponían muy nerviosas a las disqueras bien educadas, The Monks, Paul Revere and The Raiders, The Rumors, The Arrows, The Mistery Trend, The Charlatans,The Underdogs e incluso Sam The Sham & The Parahos y muchos más, ponían los cimientos psicodélicos ante el predominio de los ingleses en tierra ajena y más tarde influencia decisiva en el movimiento punk de Los Sex Pistols, inspirados en sus verdaderos padres: Los Ramones.
Y a lo que íbamos a llegar y llegamos: las recopilaciones, la recuperación de la nostalgia en las plataformas digitales y las imágenes definitivas de su principio que han llegado al rigor del 4K en algunos Blu-rays. Oír estos cuatro recopilatorios es historia fundamental para los interesados en el devenir del rock hasta incluso luego de su cantada muerte y enésima resurrección.
Y aún hay hijos alternativos de estos primigenios nuggets en otras camadas de encuentros con el pasado por género, y hasta ciudades de procedencia.
