Gocé hace algunos años y hoy lo vuelvo a paladear: Los caracteres, de Álvaro Uribe (Alfaguara. 2018). Apuntes finos como filigrana, agudos y juguetones de lo que somos y los que nos rodean. En su prólogo cita a Teofrasto o a La Bruyére como lejanos antecedentes de esos ejercicios que intentan fijar las características de personajes prototípicos y Uribe logró hacerlo con gracia y especial elegancia. Observador inteligente, alegre y ácido al mismo tiempo. Son textos breves de un refinado observador del género humano, siempre dispuesto a esbozar una sonrisa sobre ti, sobre mí o sobre él. Juzgue usted los siguientes aderezos y mejor aún acérquese al libro.
- “El abajofirmante… ha propendido menos a defender una causa que a pertenecer a una comunidad”.
- “El comisario… se complace en calificar y, sobre todo, en descalificar… Lo suyo no son los razonamientos, las apreciaciones, los matices… Es el bravucón que a punta de amenazas les impone su voluntad a los demás… Su poder no reside en lo que crea, sino en lo que destruye”.
- “El sentido es un puro idealista, un fervoroso creyente en el dogma de que, si la realidad no coincide con sus sentimientos, peor para la realidad… Una persona que recuerda con exactitud fabuladora lo que tú le hiciste o le dijiste, pero no recuerda ni una ínfima porción de lo que ella te dijo o te hizo a ti”.
- “La intransigencia no es un defecto. Es un exceso. Un desbordamiento de la confianza en sí mismo. Una certeza desproporcionada de que las propias opiniones son absolutamente incontrovertibles y no están sujetas al cotejo con las de los otros”.
- “No satisfecho con descalificar las opiniones de sus interlocutores, (el intransigente) dio en descalificar a sus personas”.
- Al mitómano “no le importa ser sino parecer”.
- Nepomuceno el hombre bueno “orgulloso de su modestia. Jactancioso de su discreción”.
- Iker, el newspeaker, “en las páginas culturales promueve la mejor de las causas, que es la suya. O la de los suyos”.
- El bully “aprendió los dos principios rectores del bullying: que, para intimidar al prójimo a seguir su voluntad, la amenaza creíble puede ser tan eficaz como la violencia palpable; y que sus órdenes, peticiones o sugerencias son más amenazantes si las respalda una turba fiel a él…. Luego se afilió al partido entonces único de izquierda donde, sin renunciar a la violencia física, se especializó en violencia verbal. Sus imprecaciones (repetidas con deleite por la prensa) no dejan en paz al gobierno, pero se enderezan sobre todo contra la propia izquierda”.
- “El tuitero artero” capaz de “degradar una discusión trivial en una rabiosa cacería de brujas”. “Del ocio al odio hay una sola letra”.
- “El yo-yo se apodera de la plática para referirse con fruición a su tema único: él… Esboza un autorretrato verbal no solicitado por sus interlocutores”.
- “Democracia directa” es la solución que propone Dante (el representante) al déficit de representatividad en la vida pública. Y como no sabe muy bien qué significa esa fórmula… él mismo se autoelige representante de todas las causas justas”.
Gracias Álvaro Uribe (1953-2022).
Profesor de la UNAM.
