La confusión sobre lo bien o mal que va el país en lo económico es cada vez mayor. Se considera que dos bajas trimestrales consecutivas generan una recesión técnica, situación en la que México encaja luego de la segunda contracción trimestral al hilo, ésta de -0.1% en el cuarto trimestre de 2021. López Obrador desdeñó dicho indicador, sosteniendo que la economía de México no está en recesión técnica, el país en 2022 crecerá al 5% “porque soy optimista”, satisfecho porque la economía mexicana está creciendo, saliendo de la crisis que provocó la pandemia del Covid-19 y porque en enero pasado se impuso nuevo récord en la generación de empleos. Estuvimos dos trimestres abajo porque se nos vino la nueva variante, aun así, se creció 5% en 2021. “No aplica la fórmula de los economistas que si dos trimestres el PIB está abajo hay recesión, esa fórmula yo creo que se las enseñaron en el ITAM ” Un gobierno como el nuestro tiene que pensar en crecimiento, pero también en bienestar. Incluso, también se crecerá al 5% anual en los siguientes dos años, para terminar el sexenio con un promedio del 2% anual”. Cosas veredes, ahora el gobierno de la 4T aspira a crecer en términos similares al de los mediocres gobiernos neoliberales ; difícilmente lo logrará.
Efectivamente, la pandemia nos ha pegado, la duda estriba en nuestra respuesta frente a la misma. La mayoría de países aplicaron la teoría económica de Keynes -utilizada en la Gran Depresión de los 1930- que implica la intervención del Estado en la economía, estimulando la demanda, inyectando toda la liquidez requerida para revertir los ciclos depresivos, ya sea mediante estímulos fiscales o la emisión de deuda pública. Lo importante es la reactivación económica y combatir el desempleo. López Obrador rechazó adquirir deuda pública para inyectar dinero a la economía, optando por programas ya anunciados como proyectos de obras públicas, reducidos créditos a limitadas pymes sin o con bajos intereses, reducción de sueldos a altos funcionarios, becas para estudiantes, adelanto en la pensión para ancianos y la promesa de crear dos millones de empleos en 9 meses. Básicamente la mayoría de contribuyentes ha afrontado el temporal rascándose con sus propias uñas. Sorprende el crecimiento económico de países de la región justamente en 2021, año del rebote pandémico: Estados Unidos creció5.7% del PIB, Chile 12%, Perú 13.2%, República Dominicana 12.3%, El Salvador 10.3%, Panamá 10%, Colombia 9.5%.
La economía de México se encuentra en niveles de 2016. El Inegi da cuenta de la sensible caída de la confianza empresarial en todos los sectores. La
inversión pública destinada a obras de infraestructura no atraerá ni pronta ni significativa recuperación. Pemex representa una onerosa y arriesgada apuesta. La reforma eléctrica , de prosperar, conllevaría una alta inversión difícil de materializar. La inversión privada está escamada. En tanto el presidente mañaneramente va acumulando adversarios -ahora sí- a los cuales señala, denuesta y a algunos incluso desafía.
La SHCP considera que el país concluyó 2021 con finanzas públicas robustas y estabilidad económica y financiera. El Inegi considera que ante la atonía de la demanda interna, la falta de inversión productiva y la debilidad del sector servicios, la economía de México está estancada.
¡Qué confusión!