Han pasado 23 años del atentado contra las Torres Gemelas de NY y con ello, el inicio de la Guerra en Afganistán, que es la tercera de siete en mi carrera como periodista. Ahí fui testigo de la expulsión del talibán de un territorio que hasta aquel entonces y 23 años después, nadie ha podido conquistar. Ni los mongoles, ni la Unión Soviética y menos los estadounidenses quienes luego de 2 décadas, salieron por la puerta de atrás, dejando a su suerte a todos aquellos afganos, hombres y sobre todo mujeres, que, por haber sido sus aliados, son ahora víctimas de los abusos cometidos a partir del regreso del talibán. Con el retiro de tropas estadounidenses del territorio de Afganistán, en el año 2021, Estados Unidos perdió su segundo round en una guerra después de la vergüenza vivida en Vietnam en los años 70.

Este aniversario coincidió con el primer debate (aunque en realidad fue el segundo en el proceso electoral), entre Donald Trump y Kamala Harris en su pelea por ocupar la Casa Blanca. ¡Y vaya pelea! La sede: Filadelfia, ciudad del mítico Rocky Balboa, así que no podría haber sido en un mejor lugar. En una esquina tuvimos a un peso completo, agresivo, con la soberbia que le caracteriza, seguro de sí mismo, pero con algunos puntos débiles en su defensa. Del otro lado, una peleadora bien entrenada, con los puños listos para actuar con temas como economía, migración y política exterior y que no se dejaría intimidar a pesar de la fortaleza de su contrincante. El peso completo atacó con todo, pero descuido la guardia y Kamala lo atacó -como si fuera un gancho al hígado-, cuando aseguró que los demócratas con Biden a la cabeza, limpiaron el desastre que Trump les heredó.

Trump contratacó buscando poner ante las cuerdas a su contrincante al hablar de migración, de racismo, tachó a la demócrata de marxista buscando que la paranoia del comunismo le permitiera noquear a su contrincante y, aunque evadía las preguntas que su opositora le hacía, al final, el peso completo se le vio molesto, a la defensiva, como cuando Drago, el durísimo boxeador ruso, fue vencido por Rocky. Tal es así que Trump no ha aceptado volverse a enfrentar a Harris en lo que sería su tercer debate rumbo a las elecciones del 5 de noviembre. ¿Habrá sido suficiente este segundo round para Trump? Falta cada vez menos tiempo para llegar al día D y es una realidad que mientras Donald Trump considera que con ataques frontales y descalificaciones, podría conseguir más votos, Kamala ha optado por pelear de manera frontal, con buenos argumentos y sin temor a lanzar un buen jab.

Al parecer, el espíritu de Balboa la acompañó pero es un hecho que en ninguno de los dos casos hay un contundente knockout y que el ganador de esta pelea será por decisión.

Hablando de guerras: ya que estamos en temas del cuadrilátero, si hay un luchador que se ha convertido en ídolo de las multitudes es Atlantis. Un luchador disciplinado, que jamás se ha rendido y que ha luchado contra todo, pero cuya peor lucha en la actualidad es con el tiempo. “Es mejor tener un millón de amigos que un millón de pesos” nos dijo en la entrevista que pudimos realizarle para nuestro podcast “En la Trinchera con José Luis Arévalo”, que pueden ver en YouTube por Canal Cero Networks. No se la pueden perder.

Los espero en mi próxima Trinchera

José Luis Arévalo

Periodista desde 1992 y Corresponsal de Guerra

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