El día de ayer, como cada año, la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), entregó al Congreso de la Unión el Paquete Económico para 2021. El Paquete lo integran los Criterios Generales de Política Económica, la Ley de Ingresos de la Federación y el Presupuesto de Egresos de la Federación. La discusión se va a dar en medio de la terrible crisis económica que está viviendo nuestro país. Se comienza a percibir con mayor claridad el daño que han causado a nuestra economía algunas decisiones que se tomaron al inicio de la actual administración, muy señaladamente, la cancelación del Aeropuerto de Texcoco. El momento tan difícil, hace más relevante la decisión que tendrá que tomar el Congreso para la aprobación de cada uno de los proyectos.
El entorno en el que se deberá abordar la discusión no podría ser más complicado. Petróleos Mexicanos se ha convertido en un barril sin fondo. La producción de petróleo sigue cayendo y los precios internacionales no parece que pronto vayan a recuperarse. A la pandemia del Covid-19 que al igual que el resto del mundo estamos padeciendo, no se le ve fin, se va a requerir mucho dinero para vacunas. La inseguridad y la violencia van en aumento. La polarización política se ha exacerbado. En el año en curso, la estimación de ingresos se ha quedado muy corta y, no obstante que se utilizaron todos los recursos con que contaba el Fondo de Estabilización de las Finanzas Públicas, la SHCP ha tenido que implementar recortes presupuestales en casi todos los rubros. La elección en Estados Unidos va a traer como siempre mucha volatilidad a los mercados.
Además de todo lo anterior, tenemos que agregar que en 2021 México vivirá un año electoral, con la elección más grande de su historia: en el ámbito federal se renovará la Cámara de Diputados y, en el ámbito local, se renovarán las gubernaturas en 15 entidades federativas, 30 congresos estatales y cera de 2 mil ayuntamientos y alcaldías.
Estamos, pues, hablando de que se deberán aprobar los presupuestos para un año electoral y el tema es más que preocupante: existen sobradas evidencias de que la apuesta de la actual administración está en los programas sociales por los que se entrega dinero directamente a las personas con un claro tinte electoral. Si algo ha quedado claro en México y en otros países, es que apuestas así tienen costos muy elevados, porque nadie gana cuando la economía se dirige tratando de conseguir popularidad y rentabilidad para el gobernante en turno.
En los últimos 25 años no se había visto tan complicado y comprometido el Paquete Económico. Será muy trascendente lo que haga el Congreso para que los recursos sean aprovechados al máximo. Es momento de potenciar los ingresos aumentando las capacidades de los gobiernos locales. El Presupuesto de Egresos debe reflejar la realidad del país. Las circunstancias han cambiado dramáticamente. Se debe revisar la viabilidad de proyectos como el Tren Maya, la refinería de Dos Bocas y el Aeropuerto de Santa Lucía. El tránsito por el 2021 no será fácil para nuestro país. Ojalá que nuestro gobierno sepa estar a la altura de lo que se necesita.