Sin haber superado la crisis de deserción y retroceso en el sector educativo, consecuencia de la mala gestión de la pandemia, hoy se cierne sobre dicho ámbito una nueva tragedia: el experimento irracional e ilegal que el oficialismo ha puesto en marcha consistente en la implementación de un nuevo plan de estudios, basado en materiales didácticos enfocados en promover su ideología, en lugar del pensamiento científico para el próximo ciclo escolar.
Violando lo dispuesto por la Constitución y la Ley General de Educación, se pretende imponer a 25 millones de alumnos, un supuesto nuevo modelo escolar elaborado con el sello de la casa; en lo obscurito, a espaldas de la sociedad, de los padres de familia y de especialistas. Por si esto no fuera suficiente, la información relativa a los procesos de conformación de dicho modelo (incluyendo asambleas que fueron públicas), fue reservada por 5 años, como si la educación de los infantes no fuera un tema de interés público.
Ante la inminencia del inicio del nuevo ciclo escolar y su próxima distribución a nivel nacional, se empiezan a filtrar los materiales elaborados bajo la dirección de Marx Arriaga, director general de Materiales Educativos y de Sady Arturo Loaiza Escalona, quien es director de Desarrollo e Innovación de Materiales Educativos y que trabajó para los gobiernos de Hugo Chávez y Nicolás Maduro en Venezuela.
Con pretensiones desbordadas de plasmar en los nuevos materiales una visión partidista de la realidad, el experimento educativo de AMLO naufragará como los otros ámbitos de su gestión. Lamentablemente, en este caso las víctimas serán los niños mexicanos, quienes verán limitadas, por su propio gobierno, sus oportunidades de acceso a conocimientos indispensables y habilidades básicas para para su desarrollo integral.
López Obrador se ha inventado en los últimos meses que la línea de su gobierno es el humanismo. Sin embargo, a decir de una de las voces más autorizadas en materia educativa, el investigador Gilberto Guevara Niebla, “el humanismo está ausente del todo en estos libros de texto gratuitos … Según estos libros, la sociedad es desigual, dividida entre un pueblo étnicamente diverso que sufre una alienación inducida por los grandes poderes económicos. Lo que se busca es ‘transformar’ la sociedad y con ello ‘emancipar’ al pueblo. Pero el humanismo parte del individuo, y en este proyecto la SEP se niega radicalmente al individuo para reivindicar la comunidad,” conforme advirtió a la revista Etcétera.
Lo que si logrará es profundizar más la polarización e imponer su discurso en una división de clases, en donde uno son los buenos y otros los malos.
En entrevista al portal Latinus, Alma Maldonado, investigadora del Departamento de Investigaciones Educativas del Centro de Investigación y de Estudios Avanzados (Cinvestav), el principal problema de los nuevos libros de texto de la Secretaría de Educación Pública es que no pasaron por una evaluación de expertos y tienen varios errores científicos y conceptuales.
Habiendo podido revisar algunos de los contenidos de los nuevos libros de texto gratuito para primaria, podemos señalar que en dichos materiales no se contienen los elementos educativos requeridos para cada uno de los grados de estudio y que más bien son una compilación abigarrada de actividades en el aula, con escasos contenidos sustantivos. Por ejemplo, en los libros de los tres primeros años se consignan un conjunto de actividades a través de largos textos que no corresponden a la formación en lecto-escritura para el alumnado. La falta de formación en matemáticas, español (ortografía, sintaxis, semántica), ciencias naturales, generará un estado de desigualdad muy preocupante entre los alumnos de escuelas públicas y aquellos de escuelas privadas que tienen acceso a otros materiales. De este modo, la “Nueva Escuela Mexicana” traiciona la oferta electorera de primero los pobres.
Mientras más voces se alzan por este crimen en contra de la niñez mexicana, el problema se cierne sobre las maestras y maestros del país, ya que en ellos recaerá la responsabilidad de enfrentar el aula con un programa sin pies ni cabeza y con materiales que poco apoyo didáctico les aportará para realizar su labor.
Por tales razones, las y los diputados federales apoyamos el pronunciamiento de nuestro presidente nacional, Marko Cortés, en el sentido de detener la distribución de los libros de texto gratuitos, hasta que se dé cumplimiento a los procedimientos marcados por la ley en su elaboración, en consonancia con lo señalado por el Juzgado Tercero de Distrito en materia administrativa de la Ciudad de México.
Asimismo, los integrantes de la Coalición Legislativa ingresaremos una acción de inconstitucionalidad por violación a la Constitución; pondremos a disposición de los padres de familia amparos colectivos para frenar la distribución de los libros; y realizaremos foros de análisis con expertos y padres de familia. Finalmente, citaremos a comparecer a la titular de la SEP y a la subsecretaria de educación básica.
Detengamos el populismo educativo, que profundizará la brecha económica y arrebatará la oportunidad de un cambio positivo en nuestra sociedad. La educación es el camino para romper el círculo de pobreza y brindar oportunidades para las niñas y niños de nuestro país.
Diputado, coordinador del GPPAN
