Este fin de semana, en el vivimos la coincidencia de dos campeones del mundo: uno, diciendo adiós a sus 35 años; y otro, convertido en quizá el mejor piloto de la parrilla, celebrando su cumpleaños 41 y pidiendo más tiempo en la máxima categoría.

Hablamos del alemán Sebastian Vettel y del español Fernando Alonso, seis títulos mundiales en cuatro palabras, pero con estilos tan diferentes y que nos han hecho deleitarnos de grandes momentos en el Gran Circo, unos llenos de gloria y otros polémicos.

Vettel firmó una de las grandes épocas del automovilismo con Red Bull, que vivió su era dorada, con cuatro campeonatos consecutivos entre 2010 y 2013, siendo el famoso Joven maravilla que sacaba vueltas mágicas de la nada para sumar pole tras pole, y que aún con pactos con su compañero de equipo, el australiano Max Webber, arrebató victorias y siempre fue por más. Fue el primer rey en Red Bull y así fue hasta el final.

Sebastian llegó a Ferrari con la promesa de repetir la dupla de un piloto alemán con la escudería italiana, arribando con estatus de tetracampeón y luego de cinco años sin resultados fue mal tratado por la escudería, ante la llegada del monegasco Charles Leclerc. Los últimos dos años con Aston Martin no han hecho menos relevante su legado; por el contrario, su visión del mundo cambió, lo mismo lo vimos recogiendo basura al terminar un Gran Premio que tirar el paraguas para dar un autógrafo. Hoy, tras 15 años en F1, Vettel, esposo y padre de tres hijas quiere más tiempo con su familia, y por eso se marcha.

Fernando cumple su temporada 19 en la máxima categoría. El nacido en Oviedo trajo el idioma español a la F1, y de la mano de Renault dio el gran golpe poniendo punto final a la hegemonía de Michael Schumacher en Ferrari con un bicampeonato en 2005 y 2006, para luego vivir una escandalosa temporada en McLaren. Con Renault ha vivido tres épocas, la última hoy en Alpine. Tras sus años con Ferrari partió para buscar nuevos retos, logrando un par de coronas en las 24 Horas de Le Mans, y luego en Indy, donde con McLaren (a donde también regresó en F1) ha buscado la tercera corona del automovilismo en las 500 millas de Indianápolis. Alonso regresó a la F1 al proyecto de Alpine, con hambre por nuevas victorias y récords, donde de hecho el pasado Gran Premio de Austria sumó el mayor número de vueltas en la categoría: 18 mil 872.

Ambos se arrebataron marcas tan notables como la siguiente: Vettel se convirtió en el bicampeón más joven de la historia de la F1 con 24 años, tres meses y siete días, marca en poder de Alonso . Ambos también fallaron en su intento de darle un campeonato más a Ferrari, Vettel destronado por las malas estrategias del equipo cuando tenían el mejor auto, en tanto que el ibérico sumó podios con un coche que nunca estuvo a su altura, de cualquier modo, ninguno cumplió su misión.

Vettel se va, Alonso busca quedarse, uno discreto, el otro polémico: dos figuras inolvidables que hemos tenido el privilegio de ver.

@jorgedialogante

Google News

TEMAS RELACIONADOS