La Fórmula 1 vive sus días más intensos como el famoso estanque de pirañas, sobrenombre que se ha ganado a pulso dada su mala fama de trampas, traiciones y acciones mal intencionadas.
Los recesos de la máxima categoría han dejado de ser eso, porque una vez que la F1 se pone en pausa se avivan las campañas a favor, pero sobre todo en contra de escuderías y pilotos. La pausa de dos semanas originada por la cancelación del Gran Premio de Rusia (posterior al de Italia), sirvió de pólvora para que redes sociales, sobre todo europeas, se fueran contra el mexicano Sergio Checo Pérez. Tan pronto como terminó el GP de Italia medios de redes sociales como The Race (@wearetherace), comenzaron a golpearlo, argumentando que según sus fuentes las alarmas en Red Bull se habían encendido por el enorme déficit entre Pérez y Verstappen, argumentando que el contrato del mexicano (firmado hasta 2024) estaba en riesgo. El medio construyó un “análisis” donde sostiene que el déficit entre Pérez y el actual campeón es más grande que entre Lando Norris y Daniel Ricciardo, llegando a preguntar si hoy Alex Albon lo estaría haciendo mejor.
La campaña contra Pérez venía acompañada no sólo de posteos, sino también de notas y videos explicando la “debacle” de Pérez. Corrieron versiones de que Nyck de Vries llegará a AlphaTauri para destronar a Pérez en 2023 y tomar su lugar en 2024. Lo escandaloso del asunto es que Red Bull no salió a defender a un miembro de su escudería, integrante que con su trabajo tiene al equipo en primer lugar del título de constructores y en clara posición de pelear el subcampeonato.
Por otro lado, este fin de semana corre el rumor en el paddock de que Red Bull y Aston Martin excedieron el presupuesto de 2021, donde Max Verstappen perdería su título, el cual recaería en Mercedes y Lewis Hamilton.
Es increíble que un organismo como la FIA tenga el análisis presupuestal de la temporada 2021 nueve meses después y a sólo 12 semanas de que concluya la 2022. En el mundo ideal esta resolución debería tenerse antes del inicio de la nueva temporada, es decir, en marzo. En segunda, no hace falta ser demasiado perspicaz para darse cuenta de que es Mercedes la que prendió la mecha para manchar el campeonato de Red Bull.
Ante esta campaña, Christian Horner sí salió a defender a RB, amenazando con tomar acciones legales contra quienes estén difamando al equipo, situación detonada por el informe publicado curiosamente por un diario alemán: Auto Motor und Sport.
El refrán decía: “Si no puedes contra ellos, úneteles”. Hoy la premisa parece ser: “Si te ganan, mánchales la victoria difamándolos”.
