Para la mayoría de los equipos en la máxima categoría el lapso de tiempo ideal para componer el camino de la temporada lo representaba el famoso parón de verano, durante el mes de julio, donde por reglamento se deben descansar 14 días consecutivos, cosa que no ocurre en este impasse primaveral.
Desde 2020 que el calendario contempla más de 20 carreras, la Fórmula 1 obliga a las escuderías a detener sus actividades casi un mes, en donde durante dos semanas consecutivas los autos no pueden desarrollarse, hacerse pruebas de viento e incluso ni tenerse juntas, para luego retomar actividades 12 días antes del siguiente Gran Premio. El objetivo es que mecánicos, ingenieros y pilotos descansen y puedan estar con sus familias, pues incluso este período coincide con las vacaciones escolares en Europa. Este intervalo generalmente inicia desde la conclusión de la ultima carrera en julio y concluye la última semana de agosto, de ahí su famoso nombre del parón de verano.
Sin embargo, este 2023 se supo casi desde el inicio de la temporada que el Gran Premio de China no se llevaría a cabo por las restricciones covid que tendría el gobierno de este país (algunos incluso afirman razones políticas ante la guerra en Ucrania-Rusia, en donde China no quiere estar en los reflectores por cualquier eventualidad), por lo que en el calendario de la F1 apareció este parón primaveral.
Durante este parón los equipos y sus fábricas sí pueden tener actividades plenas, por lo que para varios significa la gran oportunidad de hacerse un reseteo completo, tanto a nivel de diseño de auto, en la conformación de sus plantillas de ingenieros, mecánicos y directivos, tiempos en simuladores y túneles de viento, así como para juntas de estrategia.
A varias escuderías les viene tan bien este receso que muchos incluso hablan que por reglamento se debería quedar, tal como lo ha comentado Otmar Szafnauer, director de Alpine (como quien en la escuela no aprobó los exámenes en tiempo y quiere hacer la regularización en tres semanas). Pero, a equipos punteros como Red Bull no les gusta tanto detener su inercia ganadora, así lo sentenció Checo Pérez: "Ayudará a otros equipos a ponerse al día. Así que probablemente no sea tan bueno”.
En Mercedes quizá pueda ayudar a George Russell para equilibrar fuerzas con su compañero, Lewis Hamilton, mientras que en Alpine apenas habrá dado espacio para sanar las heridas del choque entre coequiperos en Australia; Aston Martin puede confirmarse como el nuevo caballo negro, mientras que para Red Bull apenas puede ser un respiro en una temporada con una guerra civil en ciernes.
@jorgedialogante