Singapur parece ser un punto de inflexión para la escudería campeona del mundo, donde quizá vea rota su racha de 15 victorias consecutivas, un récord en la Fórmula 1, en donde el equipo no ha encontrado el ritmo a lo largo del fin de semana viéndose sorpresivamente fuera del top 10 en la calificación. Sin embargo este mal sabor de boca viene precedido por un par de semanas caóticas tras las declaraciones racistas de su asesor Helmut Marko, creando una tormenta perfecta.
Primero, el caos mediático generado por las desafortunadas y ya conocidas declaraciones de Helmut Marko que dieron la vuelta al mundo, quien en una entrevista quiso dar una explicación atribuyendo su origen “sudamericano” al rendimiento de altibajos de Sergio Checo Pérez en Red Bull. Tan pronto como el Gran Circo puso un pie en Singapur vinieron un alud declaraciones de condena, pasando desde los jefes de equipo hasta pilotos como Lewis Hamilton, llegando a un punto máximo cuando se supo que la propia FIA por fin había emitido una advertencia por escrito donde se le ha recordado sus responsabilidades como figura pública en el deporte del motor de acuerdo con el Código de Ética de la FIA. Ante el huracán, Red Bull buscó implementar su operación cicatriz, por un lado con la declaraciones de Checo de que Helmut se había disculpado con él; y por otro lado, con Christian Horner, director de la escudería, argumentando que el octogenario asesor de Red Bull (sin cargo dentro de la estructura del equipo) había aprendido de sus errores. Pero cuando llegó el momento de hablar en la pista, el equipo se encontró con la sorpresa de que no habían argumentos para brillar como a lo largo de la temporada. Un irreconocible, inestable y deslizante RB19 hacía sufrir no sólo a Checo sino al propio Verstappen, además de que el coche también dio problemas de potencia, haciéndoles perder tracción. La mala noche de Red Bull terminó con sus dos autos fuera de los primeros diez de la sesión de calificación. A decir de Pérez el podio está descartado y saldrán a rescatar la mayor cantidad de puntos posibles. ¿Qué pasó en Red Bull? A juzgar por lo visto la escudería austriaca no entiende todavía a ciencia cierta cierta qué sucede con su hasta la carrera pasada, imbatible RB19 diseñado por Adrian Newey, quien también observaba desde los pits el bajo rendimiento del coche. El equipo tendrá que irse de Singapur no sólo buscando sumar, sino también con las lecciones aprendidas de un mal fin de semana en mucho tiempo. Ferrari parece tocar las puertas de un regreso ganador que los enfile a un 2024 prometedor.