A menos de 30 días de comenzar por fin el campeonato 2020 de la , todo se ha puesto sobre la mesa por parte de Liberty Media —empresa dueña de la máxima categoría—, escuderías, pilotos y patrocinadores, para que el Gran Circo ruede de nuevo; sin embargo, todo podría terminar en una predecible campaña pintada de plata para Mercedes.

Los aficionados a la categoría reina del deporte motor alrededor del mundo, estimados en una base de 500 millones de acuerdo a la propia F1, ansía con creces el inicio del nuevo campeonato, postergado por la pandemia del COVID-19 y con Grandes Premios definitivamente postergados hasta 2021, tales como Australia, Mónaco, Azerbaiyán, Singapur y Japón.

La ansiada temporada que por fin comenzará el 5 de julio en Austria podría ser un poco más de lo mismo que vimos en 2018, con un dominio casi absoluto de Mercedes. Y es que en el deseo de volver a ver rodar los autos se nos ha olvidado un poco lo que fue la pretemporada, en donde Mercedes lució como de costumbre en la era híbrida de la F1 como el equipo a vencer, seguidos por Red Bull y Ferrari, en ese orden.

El equipo alemán comandado por Toto Wolff dio muestras contundentes de superioridad; de hecho en ningún parámetro fue superado en velocidad, número de vueltas y por ende, kilómetros recorridos a lo largo de los tests en Barcelona. No todo es miel sobre hojuelas, la fiabilidad del motor Mercedes puede dar algunos sinsabores, ya que problemas con el sistema de aceite aparecieron en las fechas plateadas y en Williams, su equipo cliente, lo que llevó a usar más motores de los planeados.

Hamilton en algún momento llamó a su pretemporada como un “invierno difícil”, pero ya sabemos cómo es el inglés cuando a buscar confundir a sus rivales. Pero el problema del motor es real y puede ser un dolor de cabeza para el campeón del mundo en su búsqueda por ese séptimo título que iguale a Michael Schumacher, así como para Valtteri Bottas que pretende renovar con el equipo.

Red Bull y su motorista Honda demostraron en 2019 estar en la dirección correcta para revivir los buenos años de la escudería austriaca, y en los ensayos demostró estar listo de la mano tanto de su piloto estrella Max Verstappen, como de Adrian Newey, el mejor aerodinamicista de la F1, y si corrigen los todavía puntos débiles del RB16 serán un duro contrincante.

Ferrari se dedicó, así pareciera, a mostrar menos de lo que realmente tiene, luego de las sobradas sospechas e incluso escándalo que provocó en el paddock la revelación de un acuerdo de confidencialidad con la Fórmula 1 sobre la eficiencia de su motor durante la pasada temporada. El equipo italiano deberá mostrar su verdadero potencial en carrera, aunque pareciera estar por debajo del nivel mostrado en el pasado campeonato.

Finalmente, las miradas apuntan a… ¡Racing Point! Durante la pretemporada su fiabilidad y rapidez le ganaron el mote del “Mercedes Rosa”, atrayendo críticas a que el equipo replicaba la configuración y diseño del auto campeón del mundo. Sergio Pérez completó 782 vueltas en seis días y se ubicó a sólo cuatro décimas del segundo mejor tiempo logrado por Verstappen, algo que ilusiona a los fanáticos del piloto mexicano.

La temporada 2020 por fin llegará para despejar todas las dudas.

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