Por: Jorge Esquerra
Desde 2011 la marca estadounidense Crossfit, Inc llegó a México y quiso registrar su denominación, sin embargo, el Instituto Mexicano de la Propiedad Intelectual (IMPI) le negó tal acción por considerar que en el país ya existía una marca similar que se desempeñaba en el mismo ramo, por lo que CrossFut inició una controversia que a la fecha se mantiene.
De acuerdo con la ley y los criterios del IMPI, no puede ser utilizada en el país, debido a que genera confusión con la marca mexicana CrossFut.
Usando su poder económico y jurídico la compañía Crossfit, Inc ha mantenido por años su intención de competir deslealmente con la empresa mexicana CrossFut la cual lucha por la defensa de sus derechos ante las leyes nacionales ya que su trayectoria la avala en el mercado deportivo.
Valiéndose de un litigio abusivo, Crossfit, desafía no solo a la marca mexicana sino a las leyes que rigen en México, al pretender a través de mecanismos dilatorios y medios no ortodoxos, obtener los derechos, pese a que se le han negado desde hace varios años.
La marca mexicana CrossFut que se desempeña como registrada por todas las vías legales, nació a principios de la década de los 2000’s y promueve el deporte mexicano. Legalmente, cuenta con la autorización del Instituto Mexicano de la Propiedad Intelectual (IMPI) para la venta de aparatos de ejercicio y entrenamiento físico, ropa deportiva, pelotas, balones, raquetas y para realizar actividades deportivas.
En esta competencia desleal y fuera de toda legalidad, Crossfit, Inc se ha beneficiado de manera ilegal al usar una marca que no está registrada en nuestro país.
La marca mexicana Crossfut, fundada por el reconocido Notario Público, Ignacio Soto Borja promueve el deporte mexicano rescatando la tradición y cultura para reafirmar la identidad nacional. Y cuenta además con presencia en la Ciudad de México, Estado de México, Guanajuato, Guerrero, Hidalgo, Morelos, Oaxaca, Sonora y Veracruz.
La batalla legal continúa y recientemente, el IMPI emitió más de 20 resoluciones a favor de la marca mexicana, y pese a esto Crossfit Inc. continúa con prácticas desleales.
Es relevante resaltar que la marca estadounidense ha tenido conflictos en su país debido a la emisión de posturas racistas emitidos por uno de sus representantes. A partir de esto, diversas marcas han decidido cancelar sus alianzas con ellos.
Sería prudente cuestionar si una marca que cuenta con ese tipo de reputación en su país y que ha recurrido a prácticas ilegales para mantenerse en México, es ideal para estar incursionando en el deporte nacional.