Si la economía y la seguridad están en un mal momento, ¿por qué la aprobación presidencial es tan alta? Hoy la aprobación está en 70%, de acuerdo al modelo de agregación de encuestas realizado por Oraculus.mx. Es un nivel de aprobación superior al de los mandatarios que le preceden. Zedillo llegó a su primer informe con 37% de respaldo, Fox con 61%, Calderón con 67% y Peña con 53 por ciento (todas las cifras están disponibles en Oraculus.mx).
El paso del tiempo (y el consecuente desgaste por el ejercicio del poder) tampoco se ha traducido en una caída sostenida en la evaluación de AMLO. A diferencia de otros mandatarios cuya popularidad mostraba en estas fechas una clara tendencia a la baja —sobre todo en los casos de Fox y Peña Nieto—, el apoyo ciudadano al presidente López Obrador se mantiene estable desde hace cuatro meses. De hecho, hoy su popularidad es similar a la que tenía antes de su toma de posesión. El apoyo que ha perdido es lo ganado durante su administración, por lo que su saldo de aprobación está en ceros.
Podemos descartar que el alto nivel de popularidad del mandatario se deba a un problema de miopía, es decir, que la simpatía por el primer mandatario es tal que la gente no identifica los problemas del país o la magnitud de estos. La encuesta de confianza del consumidor realizada por Inegi muestra que la mitad de la población (49%) señala que la economía del país está peor que hace un año y solo 11% indica que está mejor. Un porcentaje todavía mayor (59%) menciona que hoy tiene menos posibilidades que hace un año para comprar muebles y aparatos electrodomésticos.
Diversas encuestas muestran que la inseguridad es por mucho el problema más importante que debe atender el gobierno, lo cual concuerda con el repunte en el número de homicidios dolosos en el país. Inegi reporta también que 74% de los mexicanos considera que vivir actualmente en su ciudad es inseguro, porcentaje que casi no ha variado desde hace tres años (ENSU, junio 2019). Incluso en la llamada encuesta de la felicidad de Inegi (Bienestar Subjetivo) se reporta lo siguiente: “aspectos que tienen que ver con la esfera pública, como el país y la seguridad ciudadana, continúan siendo los ámbitos peor valorados, con promedios de 6.8 y 5.3, respectivamente; adicionalmente la satisfacción con la seguridad ciudadana acusa un descenso, de hecho, es el único dominio que así lo hace respecto a un año atrás” (inegi, 29 agosto 2019).
Dados estos números, es previsible que impere la crítica ciudadana en la evaluación de la tarea gubernamental en estas y otras áreas. Por ejemplo, en la encuesta de EL UNIVERSAL publicada hace unos días en estas páginas, solo 42% aprueba la gestión presidencial en relación a la economía del país, 40% en cuanto a la relación con Estados Unidos y 38% la aprueba en el combate a la delincuencia (48% la reprueba). La encuesta nacional de Reforma (julio 2019) arroja resultados similares: solo un tercio de la población (36%) considera que el presidente está teniendo éxito en el combate al crimen mientras que 52% opina que está fracasando. Porcentajes similares arroja la pregunta sobre reducción de la violencia.
Hay dos temas insignia de esta administración que obtienen mayor reconocimiento por parte de la ciudadanía: 53% menciona que AMLO está teniendo éxito en combatir la pobreza y un porcentaje parecido (49%) señala lo mismo en el combate a la corrupción. Son dos casos donde se perciben más éxitos que fracasos.
En síntesis, hay una brecha importante entre la aprobación al presidente (70%) y la aprobación a su desempeño en áreas específicas como economía, seguridad, combate a la corrupción y a la pobreza. El área mejor evaluada, educación, está incluso por debajo de la aprobación a AMLO. Si la realidad, y la percepción de esta, es negativa ¿en qué descansa la aprobación al presidente? Hay una brecha importante, en algunos casos de más de 30 puntos, entre la calificación general que se le da al primer mandatario y la calificación que se hace de su gestión en las áreas más importantes del quehacer gubernamental. Es quizá el mayor enigma de la popularidad de AMLO.