El voto de los franceses en las elecciones europeas del pasado 9 de junio puede darnos algunas indicaciones. La victoria del partido de derecha, muy de derecha, Rassemblement National, el partido de Marine Le Pen, llevó al presidente Macron a disolver el Congreso y convocar a elecciones. Ese partido tiene a su derecha un pequeño partido de ultra derecha, “Reconquista” (todo un programa), liderado por la sobrina de la señora Le Pen, Marion Maréchal, nieta y verdadera heredera de Jean-Marie Le Pen, el antisemita fundador del Frente Nacional que reniega de su hija. Bueno, el Rassemblement National, Reagrupamiento Nacional logró, como anunciado por los sondeos, 33 por ciento de los sufragios, mientras que el movimiento de Macron, “Mayoría Presidencial” se quedó, como previsto, en 15 por ciento, y el socialista Raphael Glucksmann cosechó el 14 por ciento esperado. Excelentes sondeos.
La lista del Reagrupamiento Nacional proclamaba “Francia está de vuelta con Jordan Bardella y Marine Le Pen”. “Mientras la Europa de Macron agrava cada día la sumersión migratoria, la crisis de la inflación y el desprecio del pueblo, nuestro país se encuentra en la hora de decidir. Las elecciones del 9 de junio son un gran referéndum a favor o en contra del deterioro de Francia y de Europa. Pueden ustedes optar por un sobresalto nacional al elegir diputados patriotas que serán la voz del pueblo y defenderán sin descanso el interés de Francia. Contra la Europa de Macron, la Europa de las naciones que protege vuestra identidad, vuestra seguridad y vuestro poder de compra”. Pero ¿quién es Jordan Bardella? 28 años, carismático, hijo de una italiana, es la estrella que sube al firmamento francés. Marine Le Pen, su madrina, dice que cuando ella llegue a la presidencia, Bardella será su primer ministro. Lo llama “el León”.
A la extrema derecha, “Reconquista” se define “contra la inmigración, la islamización, la ecología castigadora, la ideología LGBT, la Comisión de Bruselas. A favor de nuestra identidad, nuestros valores, el trabajo, la Francia rural, nuestras familias, nuestra civilización y sus valores cristianos”. Una lista “soberanista” anuncia: “Europa, basta. Salir de la Unión Europea. El Frexit es la única solución para recuperar el control de nuestro dest ino. ¡Rechacemos la tercera guerra mundial saliendo de la OTAN! ¡No al pacto migratorio europeo! ¡Ni un euro más para Ucrania que ya nos costó 13 billones!”.
Hay que recordar que, en 2022, la Unión Europea recibió, 5,100,000 inmigrantes, el doble que el año anterior.
La lista “Mayoría presidencial”, de los partidarios del presidente Macron, se defendía con el lema “Con Europa, Francia es más fuerte, un Europa renaciente, una Europa en marcha. Emmanuel Macron es el presidente más europeo que Francia haya tenido. Cuando la guerra toca a nuestra puerta, cuando la crisis climática acelera, cuando la revolución tecnológica afecta nuestra vida, es gracias a Europa que tendremos éxito”.
En cuanto al partido socialista, presentó como cabeza de lista a Raphael Glucksmann, para “Despertar a Europa”. Glucksmann, hijo del filósofo André Glucksmann, 45 años, tiene un pasado impresionante. Empezó como periodista; en 2004 realizó dos documentales, uno sobre el genocidio de Ruanda, otro sobre la Revolución Naranja en Ucrania, que fue a acompañar. Luego se volvió consejero político del presidente de Georgia y se casó con Eka Zguladze, secretaria de Gobernación de Georgia hasta 2012. En 2013 los dos se fueron a Ucrania y participaron en la Revolución de la Dignidad (Euromaidan) que tanto molestó a Putin. Defensor de los uigures del Sinkiang, que molesta a Pekín. ¿Será el futuro del partido socialista y el candidato presidencial de los republicanos frente a Marine Le Pen? Saltó hace poco a la palestra, igual que Jordan Bardella del Reagrupamiento Nacional. Se comprometió a “defender sin tregua ni descanso nuestros principios fundamentales y nuestros intereses vitales en un momento clave de nuestra historia”.