Para tener éxito en ajedrez hay que conocer sus reglas, principios, sistemas de apertura, teoría del medio juego, técnica de finales y mucho más, pero como su dinámica y complicaciones son casi infinitas, es imposible abarcarlas todas. Según el filósofo Karl Poper (1902-1994) “Nuestro conocimiento sólo puede ser finito, mientras que nuestra ignorancia es infinita”.
Conocer es un estado superior de la inteligencia. En ajedrez ayuda a comprender, concebir estrategias y superar las dificultades de la lucha, aunque el poeta y ajedrecista Jaime Sabines (1926- 1999) indicó: “Los seres humanos somos unas criaturas infinitesimalmente pequeñas, ante una inmensidad de conocimientos que no hemos ni siquiera sospechado”.
Es más, el inventor Thomas Alva Edison aseguró: “No sabemos ni un cienmillonésimo de nada”. Sin embargo, al menos en ajedrez, conocer ayuda a crear las condiciones necesarias para triunfar. Con razón el filósofo Sócrates concluyó, “Sólo hay un bien: conocer. Solo hay un mal: ignorar”.
PARTIDA
Las blancas utilizan la coordinación de sus fuerzas para conseguir ventaja decisiva.
Blancas: Paul Keres
Negras: Enrique Heinrich
Apertura inglesa. Buenos Aires, 1955.
1.c4 Cf6 2.Cf3 c5 3.Cc3 b6 4.e4 d6 5.d4 cxd4 6.Cxd4 Ab7 7.f3 g6 8.Ae3 Ag7 9.Dd2 Cc6 10.Ae2 Cxd4 11.Axd4 0–0 12.0–0 Cd7 13.Axg7 Rxg7 14.f4 Rg8 15.Tad1 Cc5 16.De3 Dc8 17.b4 Ca6 18.a3 Cc7 19.f5 Ce8 20.e5 dxe5 21.Dxe5 Cd6 22.fxg6 hxg6 23.Dxe7 Cxc4 24.Td7 Ce5 25.Tc7 Cc6 26.Dd6 (Diagrama. Najdorf tiene calidad e iniciativa) Dd8 27.Tfxf7 Txf7 28.Dxg6+ Rh8 29.Dh5+, rinden negras. 1-0.
rjavier.vargas.p@gmail.com