La esencia del ajedrez es la meditación. Meditar es el arte de aplicar el pensamiento a la consideración de algo interesante. Nace de la duda y se proyecta hacia los horizontes más lejanos del conocimiento. Sus beneficios y disfrute son invaluables: elude las distracciones, ayuda a comprender con amplitud y profundidad lo que sucede, centra la atención en propósitos, combinaciones y objetivos trascendentes. Según el lexicógrafo Roque Barcia, “En la meditación se piensa continua y apasionadamente sobre los arcanos de la naturaleza. Es una función psicológica. El que medita busca la verdad; el que es sabio medita”.
Ante el tablero, la meditación consiste en estar concentrado y consciente del desarrollo, retos, variantes y objetivos de la contienda. Es una placentera experiencia de introspección, un viaje al interior de sí mismo, una indagación amplia, detallada e intuitiva de lo que está en potencia. Con razón el pensador Osho ha concluido: “La intuición abre sus puertas a través de la meditación”.
PARTIDA
Las negras sacrifican varias piezas, toman la iniciativa y arrinconan al rey blanco para darle jaque mate
.Blancas: B. Fleissig
Negras: Carl SchlechterViena, 1893. Defensa holandesa.1.b4 e6 2.Ab2 Cf6 3.a3 c5 4.b5 d5 5.d4 Da5+ 6.Cc3 Ce4 7.Dd3 cxd4 8.Dxd4 Ac5 9.Dxg7 Axf2+ 10.Rd1 d4 11.Dxh8+ Re7 12.Dxc8 dxc3 13.Ac1 Cc6 14.Dxa8 Dxb5 15.Af4 Dd5+ 16.Rc1 Ae3+ 17.Axe3 Cf2! (Diagrama. Con este sacrificio, las negras acorralan al rey blanco para propinarle la estocada final) 18.Axf2 Dd2+ 19.Rb1 Dd1+ 20.Ra2 Dxc2, jaque mate.
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