La semana pasada, en este espacio, escribíamos que la siguiente Presidenta de México, Claudia Sheinbaum, tendrá un cúmulo de condiciones favorables como no las ha tenido ningún otro titular del Ejecutivo en más de 80 años. Esto le dará grandes oportunidades e importantes márgenes de maniobra. Pero también dijimos que “habrá retos” y, en menos de una semana, ya se materializaron. De manera directa le “cantaron el pleito” a su futuro gobierno.
El primero, que mencionamos la semana pasada, es el gobierno de Estados Unidos, sea cual sea el partido que gane la elección presidencial. La narrativa antiinmigrante y antiacuerdos de libre comercio vuelve a pesar en la agenda electoral de nuestro vecino del norte. De hecho, en la Convención Republicana, entre las palabras más pronunciadas por todos los oradores estuvieron migración, droga, deportaciones, T-MEC y México.
Pero dos días después de acabar la convención, en un evento de campaña, Donald Trump se fue directo —aunque confusamente— contra México y su gobierno, lo que motivó que la virtual Presidenta electa y su futuro secretario de Economía, Marcelo Ebrard, le respondieran verbalmente. Incluso, ella calificó como “soez” el lenguaje del expresidente. Ayer, en su conferencia de prensa, Sheinbaum fue más mesurada, aunque siguió a la defensiva contra Trump. El que también respondió, acomedidamente, fue el gobierno saliente, de Andrés Manuel López Obrador, al señalar, por conducto del secretario de Hacienda, Rogelio Ramírez de la O, que el comercio con China no es parejo y que México hará una revisión de este, justo parte de lo que busca Trump.
Así, ya sabemos: habrá “pleito” con Trump. El gobierno saliente de AMLO prefirió “torearlo”. El entrante, de Sheinbaum, prefirió contestar directo. ¿Cuál estrategia es mejor?
Depende de lo que se busque. Me parece que López Obrador, quien conoce bien a Trump, hizo lo correcto en no “engancharse”. Ambos personajes se parecen mucho, y AMLO sabe que Trump hace lo mismo que hace él cuando se le reta discursivamente: dobla la apuesta, y viene la cerrazón. Andrés Manuel prefiere entrarle a los temas con Trump de “ladito”. En unos meses sabremos cómo la Presidenta y su equipo lidiarán con Trump, quien hasta ahora parece avanzar en las preferencias para ser el siguiente presidente de EU.
Parece que los medios de comunicación estadounidenses estiman también que Trump ganará la elección, dada la amplísima cobertura que le dieron a su evento. Más de una docena de medios televisivos transmitieron en vivo la convención, logrando su discurso tener una audiencia de 25.4 millones de televidentes, números semejantes a los de un importante partido de beisbol en ese país.
Con cualquier candidato que gane la presidencia de EU, el reto es hacerle sentir que México será su aliado en lo comercial, lo diplomático y en la seguridad nacional. Eso hizo justamente el general Lázaro Cárdenas (1934-1940) durante los conflictivos años de la Segunda Guerra Mundial. Una situación similar a la que se vive hoy en lo geopolítico.
El segundo reto que tendrá Sheinbaum es la seguridad. El crimen organizado sabía perfectamente quién era Milton Morales: conocía sus logros policiacos en su gobierno en la CDMX y también su cercanía con el futuro responsable de la seguridad e inteligencia federal, Omar García Harfuch. Su asesinato, el número de criminales que participaron y la forma en que lo ejecutaron es un mensaje.
Lidiar con el crimen organizado será más complicado que llevar la relación con EU. Lleva seis años manejándose con impunidad prácticamente total, ha avanzado varios giros de negocios y controla cada vez más territorio. García Harfuch era el único jefe policiaco que siempre mantuvo contacto y operaciones con las agencias de seguridad de EU: de hecho, estuvo la semana pasada en reuniones en Washington, D.C., según reportó la prensa nacional y extranjera.
Con EU siempre se pueden encontrar puntos de acuerdo. Con el crimen organizado no puede haber acuerdo alguno. Los dos principales retos del siguiente gobierno aparecieron súbitamente. Habrá que ver cómo lidian con ellos. Necesitarán temple, inteligencia, buenos reflejos y buenos funcionarios. El domingo perdieron a uno eficiente. Q.E.P.D.
X: @JTejado
