Este 2024 concluye con más sorpresas de las esperadas y no todas son buenas.
—Para empezar, el nombramiento de quién será el nuevo embajador de Estados Unidos en México, Ron Johnson. Ya se ha comentado su amplia experiencia en temas militares —es excoronel de las fuerzas especiales de aquel país y exdirectivo de la CIA—, pero quizá su fase más interesante es que cuando fue embajador en El Salvador, se encargó de descarrilar proyectos e inversiones de China en ese país centroamericano. En concreto, había planes de una isla, un mega puerto y una zona industrial anexa a éste, todo bajo control chino. Así que habrá que estar pendientes de qué faceta usará más el recién nombrado embajador: la militar o la anti-China. Ambas podrían ser un dolor de cabeza para la 4T.
—Sin embargo, la 4T se golpea a sí misma. ¿A quién se le ocurrió nombrar al exgobernador de Chiapas, Rutilio Escandón, como cónsul de México en Miami, Florida? Sí, en la sede del trumpismo americano y de donde han salido la nueva fiscal general, Pam Bondi, y el secretario de Estado, Marco Rubio, se nombra a un funcionario mexicano que ha dejado Chiapas en manos del crimen organizado y prácticamente en una guerra civil, financiada por narcotraficantes de México y Centroamérica. Esa es nuestra mejor carta de presentación diplomática para el rijoso gobierno que llega.
—También de la 4T destacó el agarrón entre sus coordinadores en el Congreso, el senador Adán Augusto López, contra el diputado Ricardo Monreal. Todo por un supuesto recorte presupuestario del segundo al primero. Pero esto bastó para hacer acusaciones sobre el uso indebido de 150 millones por Monreal durante su paso por el Senado (2018-2024). Fuentes informadas señalan que Monreal tiene sus gastos auditados y que Adán Augusto será desmentido. De ser el caso, sería el segundo zafarrancho del senador de Tabasco en una semana. ¿Por qué tan calientes sus ánimos? Por lo que sea, se “llevan fuerte”.
—El fútbol mexicano estaba teniendo un torneo de ensueño. Récords de asistencia en los estadios: 23 mil personas en promedio cada juego, y eso sin contar que el Estadio Azteca que está en remodelación. Niveles máximos de audiencia televisiva, jornadas libres de violencia y cada vez más familias enteras asistiendo a los partidos en un torneo en donde el Club América se coronó campeón, hasta que el viernes pasado en la asamblea de dueños hubo tremendo diferendo entre equipos, señalándose como el instigador principal al dueño del Pachuca. Esto durante una reunión en la que se pensaba avanzar en vender un porcentaje de cada equipo (10%) a un fondo de inversión para capitalizar a la Liga y sus clubes. No hacerlo nos pone como país y como futbol en desventaja sobre otros países, señaladamente EU, que pronto tendrá mejores equipos que nosotros con base en mejores salarios. Eso significaría el fin del futbol mexicano y la preeminencia de la Major League Soccer. Al parecer, no dejar atrás la multipropiedad y seguir escondiendo recursos recibidos de gobiernos estatales y hasta del crimen organizado estarían detrás de las desavenencias. El ahora encargado de retomar el rumbo será el experimentado Mikel Arriola.
—El proceso de elección de juzgadores a nivel nacional, para junio de 2025, sigue padeciendo de imponderables. El INE no sabe cómo hacer una elección para la que pidió 13 mil millones de pesos y le dieron la mitad, y el Poder Legislativo tuvo errores en sus listas de candidatos. Una elección que debería salir inmaculada se complica cada día más. Veremos en qué acaba, pero tener 60% menos casillas que en las últimas elecciones federales no parece ser una buena opción para atraer a votantes ni para que sean realmente ciudadanos quienes cuenten esos votos.
Esta columna tendrá un receso hasta el 7 de enero de 2025. Muchas gracias por su preferencia y mis mejores deseos para el año que está por iniciar. Ojalá le podamos reportar menos “sorpresas” y mayor certeza en todos los rubros. X: @JTejado