Las marcas son socios muy importantes en el deporte, su participación significa ingresos para las instituciones, lo cual permite cumplir con la planeación económica de cualquier club o federación.
Un patrocinador significa dinero, comunicación y construcción de marca.
Dependiendo el deporte, es el perfil del patrocinador.
Las marcas buscan un público en común. No son los mismos patrocinadores en el golf, que en el futbol.
Siempre, las empresas buscarán ser compatibles, compartir los mismos intereses, amplificar el mensaje y buscar nuevos clientes.
En el futbol mexicano, las industrias que participan son muy claras: Refrescos (40), autos (34), construcción (25), transportes (22) y hoy el rubro de las apuestas es muy importante.
Si hacemos un ranking de los clubes pertenecientes a la Liga MX, por el número de patrocinios con los que cuentan, tenemos este resultado:
1.— Tigres (31).
2.— Monterrey (24).
3.— Xolos (22).
4.— Pachuca (22).
5.— Atlético de San Luis (21).
6.— Querétaro (20).
7.— Necaxa (18).
8.— Puebla (18).
9.— Atlas (17).
10.— Pumas (16).
11.— Santos (15).
12.— León (14).
13.— Guadalajara (14).
14.— Mazatlán FC (13).
15.— América (12).
16.— Toluca (10).
17.— FC Juárez (9).
18.— Cruz Azul (3).
En el caso de la Liga MX, ostenta seis patrocinadores y la Selección Mexicana, a la espera de sumar o restar marcas de cara a la Copa del Mundo, hoy presume 15 socios.
Como podemos ver, los clubes “grandes” del futbol mexicano no son los que más patrocinadores tienen.
A veces, cantidad no es calidad, aunque —en el caso de Cruz Azul, al tener sólo tres socios comerciales— la consecuencia son las malas decisiones tomadas fuera de la cancha.
En el caso de los equipos del norte del país, la identificación de una región o estado con su equipo siempre resulta bastante importante.
Todo esto significa millones de ingresos, lo cual permite a los equipos operar adecuadamente su año futbolístico.
El objetivo de los patrocinadores es —ahora— dar un buen servicio, dar un reporte de actividades y —de esta forma— buscar la renovación continua y —obviamente— la obtención de nuevos socios.