Nueve meses son los que nos separan de los Juegos Olímpicos y en las ultimas entregas he insistido sobre el tema y sobre todo con todo lo que va a suceder al rededor de esta competencia.
En Japón ya se puede ver cada día mas comunicación, los vagones del metro ya tienen publicidad con las mascotas de los juegos, algunas marcas empiezan a comunicar que son patrocinadores de la justa veraniega, sobre todo marcas como Coca Cola, Asahi (marca de cerveza japonesa) y otras que de igual forma tendrán presencia en dicha competencia. De igual forma muchos atletas japoneses emplean a tener presencia en el mercado local, algunos puntos de venta en el aeropuerto, en la Torre Sky Tree , en algunas estaciones de tren y en puntos estratégicos de la ciudad de tokyo ya empiezan a tener presencia.
De igual forma en los Estados Unidos marcas como P&G ya empiezan a tener comunicación masiva con algunos competidores y en un caso sobresaliente con el equipo olímpico de gimnasia, el cual sin duda alguna será protagonista en tierras niponas. Un caso sobresaliente es el Simon Biles, quien es la máxima figura de este equipo y su comunicación esta siendo mas constante.
En México sorprendentemente las marcas siguen pensando qué hacer, no definen estrategia, ven lejanos estos juegos, no visualizan de forma correcta todo lo que pueden hacer y todo lo que pueden tener como beneficio, es increíble que la visión de los estrategas sea tan corta y sobre todo temerosa y fría. Unos juegos olímpicos son el pretexto perfecto para vincular una marca con la pasión, triunfo, salud, deporte, bienestar, aspiración, ilusión, trascendencia etc, valores que nadie se los va a entregar, solo se los va a dar el deporte, es el único canal de comunicación que logra esto.
Cuando alguien pone de pretexto el horario, la distancia, el poco conocimiento de los juegos y sobre todo la poca visión de lo antes mencionado.
Sin el afán de critica, porque ademas la campaña de publicidad es aceptable y logra su cometido, pero imaginan ustedes que una marca como LALA en vez de pagarle millones de pesos a un actor consagrado como Chris Evans , en donde se habla de los valores del producto y que al tomarlo se puso “ fuertote y grandote ” se hubiera buscado a un atleta mexicano quien también gracias a que tomo esa leche gano una medalla olímpica, podría hacer sentido, pero nos da pereza hacer esfuerzos y vamos por el camino mas corto y sin obstáculos.
Hoy también existe una gran oportunidad para hacer grandes promociones y ofrecer la experiencia de estar en TOKYO una ciudad que esta de moda y que es sin duda alguna aspiraciones para cualquier persona, le guste o no los juegos olímpicos y el deporte, es una experiencia solo algunos podrán vivir y este factor podría ser aprovechado por las marcas, solo se tienen que ser un poco creativo, atrevido y buscar el beneficio mutuo, el del productor y el del consumidor.