Se dice que esta semana vienen cambios sustanciales en el futbol mexicano, cambios de estructura y cambios de fondo.
Esta, sin duda alguna, es una gran oportunidad para que nuestro balompié tome el rumbo correcto en un momento en el que la globalización del mundo y del deporte están en su apogeo, y en donde nuestro país y nuestro futbol estarán en los ojos del planeta, ante una Copa del Mundo que se estará jugando en tan sólo 60 meses.
Entiendo que el futbol mexicano tiene dueños, y es un negocio de pocos, pero dudo que esos empresarios y/o inversionistas quieran ver que su dinero valga menos o se diluya.
La realidad es que cualquier empresario que invierte quiere duplicar o triplicar su inversión y que esta sea a largo plazo.
Más allá del nombre, de su cargo y de todos los cambios que vengan, los dueños deberían buscar algunas alternativas para que su negocio crezca, se construya de mejor forma y —obviamente— deje más dinero.
Pongo en la mesa algunos ejemplos que podrían servir de proyecto para un futbol que necesita, de una vez por todas, crecer y generar más dinero.
1.— Reducir el número de extranjeros de forma considerable y crear las plazas para jugadores “franquicia”.
Entiendo la economía del peso mexicano, pero podría ser opción que se genere una bolsa para traer “estrellas” que impulsen la internacionalización de nuestro futbol.
2.— Invertir y mejorar los servicios de cada uno de los estadios: mayor seguridad, mejor comida, mejor bebida, mejores instalaciones, mejor experiencia, mejor internet, mejores precios y mejor espectáculos, más allá de lo que suceda en la cancha.
3.— Generar un modelo de franquicia en el que se abran tiendas en México y Estados Unidos, con todo el merchandasing de los equipo de Liga MX y Liga de Expansión, en donde se genere una construcción de marca para los clubes.
4.— Abrir a todas las televisoras, radiodifusoras y plataformas digitales el acceso a los partidos de futbol, ya sean de Liga MX y/o Expansión.
Todos tendrían que invertir para tener acceso a este contenido y también apilar de forma inmediata la internacionalización de esta señal.
5.— Unificar patrocinadores, construir relaciones de valor y no estar deambulando de marca en marca.
6.— Buscar participar en un torneo continental o construirlo, no sólo depender de nuestra relación con la MLS.
Y podrían existir más opciones, pero la realidad es que la vida y el destino están poniéndonos una gran oportunidad, para hacer crecer un negocio, en el cual todos participamos y todos nos beneficiamos.