Tuve la oportunidad de charlar con Roger Bartra, en la reciente edición de la Feria Internacional del Libro de Guadalajara, sobre su más reciente libro, Chamanes y robots, en el que explica cómo los procesos, o efectos placebo, que aplican los chamanes o médicos a sus pacientes con la intención de curarles, es muy similar a lo que buscan implantar los ingenieros en las inteligencias artificiales; para Bartra, el robot debe experimentar además procesos de placer y dolor para generar algo parecido a una conciencia en las máquinas, no sólo los algoritmos complejos conseguirían tan anhelado fin; sin embargo, Bartra reconoce que los alcances de las nuevas tecnologías en la cotidianidad son relevantes, a pesar de que una verdadera conciencia parezca un sueño lejano. El arte parecería una de las áreas más susceptibles a ser “tomada” por la tecnología, quizá porque subyace una subjetividad implícita, cierta maleabilidad en la composición y, hay que decirlo, también se juega a que el espectador no comprende la obra moderna, y en ese sentido se puede ser excesivamente críptico o abstracto. Hay también una aplicación sustancial en lo militar, el doctor Bartra, si bien es moderado respecto al futuro de las nuevas tecnologías, se suma, como la mayoría de los expertos, al problema latente de poner en las manos equivocadas (quizá no hay una “mano correcta”) la tecnología con potenciales de genocidio. Pero hay también peligros en campos menos obvios, aunque cada vez más evidentes: las noticias falsas. Justo en estos días, Facebook anunció que no vetará las llamadas fake news políticas en sus servicios, esto después de que Google y Twitter adoptaran medidas para evitar que sus usuarios vieran anuncios políticos en sus plataformas, esto no quiere decir que los usuarios no recibirán el tuit de algún político si lo siguen, pero no aceptarán la compra de publicidad política. Por otro lado, comienzan a proliferar Inteligencias Artificiales creadoras de contenidos, generadoras de noticias, en español llama la atención LEO, una startup española que es capaz de redactar notas con una precisión que harían a más de uno dudar si no lo escribió un experto en el tema. Le pongo un ejemplo de una nota generada por esta Inteligencia Artificial, juzgue usted: “El Real Madrid destroza con 3 goles al Atlético de Madrid, que dejó el marcador a 1 el pasado sábado. El Real Madrid comienza la jornada con 42 puntos y en la posición tercera; una buena oportunidad para alcanzar al Atlético de Madrid”. En otro polo, un tribunal chino acaba de determinar que un artículo escrito por un algoritmo de la empresa Tencent tiene la misma protección de derechos de autor que un texto escrito por una persona, en este caso una noticia financiera; por supuesto, podemos ir imaginando lo que esto puede implicar a la hora de demandar por la difusión de una noticia que afecte a un particular.

Es cierto, como dice el doctor Roger Bartra, no es tan sencillo alcanzar los niveles de conciencia en las máquinas que se han expresado en la literatura o el cine, por lo menos no parece ser algo que veremos en vida en esta generación; pero al parecer, tampoco lo necesitan tanto.

herles@escueladeescritoresdemexico.com

Google News

TEMAS RELACIONADOS